19 de Agosto del 2012 GEMA GALGANI Autres Dimensions
Original en francés.http://www.autresdimensions.com
Canalizado: Jean Luc
Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Susana Milan
Original en francés.http://www.autresdimensions.com
Canalizado: Jean Luc Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Susana Milan
Canalizado: Jean Luc Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Susana Milan
GEMMA GALGANI 19 agosto 2012
Soy GEMMA GALGANI. Hermanos y Hermanas, dignaos recibir todo mi Amor. Vengo a vosotros
en tanto que relevo del Manto Azul de la gracia y voy a intentar expresar por
mis palabras y mi Presencia, al mismo tiempo, en vosotros y a vuestro lado, lo
que significa esta simple expresión: el Éxtasis en acción. Voy a intentar
haceros entender, mediante las palabras y la conciencia, en qué el Éxtasis en sí
mismo, es ciertamente la acción más importante que pueda haber sobre este mundo.
Como se dijo (y quizá os acordáis) existen actualmente, encarnadas en esta
Tierra, tres Estrellas. Han existido en todo tiempo, cierto número de Estrellas
encarnadas, cierto número de Ancianos e incluso cuando nuestras presencias no
han sido conocidas por el mundo, nuestra acción, por nuestra presencia y nuestro
Éxtasis, ha mantenido de alguna forma, la conexión a la Fuente y a la Luz, no
solamente para nosotros sino por supuesto, para toda la humanidad. Hace mucho
tiempo, con la creación de la Atlántida, hizo falta mantener esta conexión. Por
supuesto, el Hermano o Hermana que observa un Éxtasis desde el exterior, si se
puede decir, con la mirada de la razón, con la conciencia de la personalidad,
verá muy frecuentemente (y sobre todo si no hay percepción de la Vibración de la
energía y de la conciencia), solo una pérdida de tiempo, más que una persona que
está en otra parte que encarnada. Y sin embargo, si pudierais ver lo que pasa en
los planos que os son invisibles, sobre los Éteres más elevados de la Tierra,
constataríais por vosotros mismos, que esta acción del Éxtasis en sí misma viene
literalmente a bañar el Éter invisible en la Luz.
El Éxtasis no se vive jamás para sí. Tiene siempre una implicación
mayor, que es mantener la conexión a la Luz y permitir a esta Luz, estar
presente en el Éter de la Tierra, aunque sea invisible a la personalidad,
invisible a la mirada. Por supuesto, la conciencia habitual y ordinaria de la
encarnación, no puede captar la acción del Éxtasis y la personalidad tendrá
siempre tendencia a ver una huída de la realidad, una pérdida de tiempo o todo
lo más, un proceso que no permite vivir su vida. Es ciertamente diferente para
aquél cuya conciencia no está ya instalada en la personalidad, sino que está
presente dentro de Sí, es Absoluto, porque en esos momentos, la percepción de la
energía se hace clara. Existe por otra parte, y sobre todo en nuestros Hermanos
orientales, posibilidades de ceremonia dirigida a hacer Comunicar este Éxtasis a
todos los Hermanos y Hermanas que asisten, más allá de la asistencia, la acción
del Éxtasis es mucho más importante. El Éxtasis refuerza esta unión, esta
conexión a la Luz y mantiene este vínculo. Así pues, lo que posiblemente habéis
realizado como rol de Ancla, de Sembrador de Luz y ahora Liberador de la Tierra,
vuestra acción más fundamental es la que se desarrolla sobre los planos que os
son invisibles.
Entonces el Éxtasis procura como se ha dicho, la Alegría, el estado
de gracia, Shantinilaya, los Samadhi. El Éxtasis más puro es el que no se
acompaña de ninguna percepción de otra cosa que el propio Éxtasis. El Éxtasis en
que no hay ni visión, ni percepción, no hay nada más que el Amor más puro,
independientemente de cualquier visión, de cualquier memoria y de cualquier
identidad. Es este Éxtasis (sea dentro de la Infinita Presencia o del Absoluto)
el que tiene la acción más grande y la más importante sobre el Éter de la
Tierra. Por supuesto, existen efectos Interiores pero si este Éxtasis fuera
simplemente ese efecto interior, habría efectivamente en ese caso concreto, una
visión y un estado personal que no tendría ningún interés para el resto de la
humanidad. El interés del Éxtasis, si puedo decirlo, no es tanto vivirlo uno
mismo, sino más bien, crear esta Luz en el Éter de la Tierra. Los efectos
perceptibles para aquél que lo vive son ciertamente importantes, pero lo son aun
más para la Tierra. El conjunto de la humanidad se beneficia, aunque no tengan
conciencia, aunque no lo perciban, aunque lo rechacen, porque el Éter de la
Tierra que ha sido alterado no contiene todavía toda la Luz que hubiera debido
haber, como en los Universos Unificados.
Sean las Estrellas, los Ancianos o los místicos, el estado de Éxtasis
no es propiamente hablando, una meditación o una voluntad sino más bien,
precisamente, la desaparición misma de la intención de meditar, la desaparición
de la propia persona. Y esta desaparición, es precisamente, lo que va a permitir
servir al conjunto de la humanidad, de manera mucho más importante que cualquier
otra acción. Así que, mientras la mente está aun presente y no ha sido sometida
(por el Supramental, por la Luz, por el CRISTO), esto puede representar, incluso
para aquellos que lo viven, un sentimiento de inutilidad. Y lo propio del
Éxtasis (sobre todo cuando éste se hace cada vez más importante, invasor,
percutor incluso) puede traducirse cuando desaparece, por un sentimiento de
carencia. Vivir Shantinilaya, y retornar luego a la personalidad, puede dejar en
los primeros tiempos, un sentimiento de ausencia y a veces incluso de tristeza.
No debéis que inquietaros. El refuerzo de vuestros momentos de ausencia, el
reforzamiento de lo que pasa en vuestro cuerpo y en vuestra conciencia, puede
dejaros a veces, cuando esto se atenúa y desaparece, un sentimiento de vacío y
de ausencia, traduciéndose entonces por la duda, por la intervención de la
razón. Esto forma parte, yo diría, de un proceso normal. Y esas oscilaciones del
humor, esas oscilaciones de la propia conciencia, esos pasajes que se efectúan
entre la personalidad y el Sí (y, si se vive, entre el Sí y el Absoluto) os
permiten precisamente (más allá del humor del momento, cuando esto desaparece),
daros cuenta por vosotros mismos, del sentimiento de completitud total que se
manifestará con el Éxtasis. Pero lo más importante no es eso. Porque la obra de
servicio más importante es ciertamente lo que pasa precisamente, a nivel del
Éter de la Tierra y no solamente en vosotros. La acción del Éxtasis es ante
todo, reforzar la propia Vibración la cantidad de Partículas Adamantinas y la
posibilidad de abrir, yo diría, ciertos canales interdimensionales que todos
nuestros Hermanos y Hermanas, pueden extraer. Existe pues, un efecto acumulativo
y como habéis notado y como nosotros os hemos dicho, lo que habéis realizado ha
permitido reducir los tiempos de la Tribulación. Esto ha sido un gran beneficio.
Y como os dijo MARÍA hace pocos días (ndr: su intervención del 15 agosto),
cuanto más dure este tiempo, más debéis regocijaros, porque eso da la
oportunidad de llenar el Éter de la Tierra de más y más Luz, de responder a la
Onda de Vida por vuestro propio estado, y eso es lo más importante. Es eso lo
que permite a un número cada vez más grande de Hermanos y Hermanas conectarse al
Supramental, conectarse a nivel del Corazón.
La acción del Éxtasis no es una pasividad, no es retirarse del mundo,
no es una huída de la realidad, sino más bien el establecimiento de una nueva
realidad. El mejor de los servicios es a ese nivel. Entonces, vosotros mismos,
cuando salgáis (si lo vivís) más allá de la nostalgia del Éxtasis que estaba ahí
unos minutos antes, puede manifestarse un humor pesimista o una idea que intenta
deciros: “¿para qué?”. Justificando el hecho de que tenéis actividades, tareas
que hacer, obligaciones que realizar. Pero cuanto más crezcáis en el Éxtasis
podréis realizar lo que tenéis que realizar, en el mismo estado. Y algunos de
vosotros, sea ahora, sea muy próximamente, vais a daros cuenta de que el Éxtasis
no se detiene al salir de él, y que los efectos, los beneficios (para vosotros y
para el conjunto de vuestros Hermanos y Hermanas, donde estén) van a reforzarse.
Vais a observar que, en ese estado, sois capaces de hacer y de llevar a buen fin
vuestras actividades destacando y sin hacer esfuerzo, sin estar en un estado
mental negativo o contrariado. El aprendizaje del Éxtasis, su repetición es
ciertamente para vosotros como para la Tierra y todos sus habitantes, una acción
potente que puede darse aunque sea invisible al exterior. Y es por cierto,
vuestro trabajo de Ancla y Sembrador de Luz, lo que de alguna forma, ha
suprimido las dificultades, lo que hace que las cosas por el momento, pasen más
suavemente que lo que los profetas anunciaron.
El Éxtasis en acción es la voluntad de la Luz, ya no es vuestra
voluntad personal. Y esta voluntad de la Luz es Inteligencia, porque sabe
pertinentemente lo que realiza, como si de alguna forma la propia Luz fuera
consciente: consciencia actuante, consciencia activa. Y además, aquellos de
vosotros que alcanzan esos estados y los vivan, se dan cuenta muy bien de que a
veces, más allá de las fluctuaciones del humor, los mecanismos generales de
vuestra vida son diferentes. Esto contribuye a estableceros en el desapego, os
permite ver más claro las particularidades de este mundo, como de todos los
seres humanos con los que estáis en contacto, sea agradable o desagradable. Esta
claridad, esta Transparencia, es como si mirarais de otra forma y percibierais
de otra forma lo que se despliega en vosotros, como lo que se despliega a
vuestro alrededor o en el planeta.
Vivir el Éxtasis no es ni una huída, ni una meditación. Vivir las
Comuniones con nosotros permite elevar lo que sois y elevar a la Tierra misma.
Es en ese sentido que los Ancianos os han dicho de manteneros Tranquilos. Es en
ese sentido que nosotras las Estrellas, os invitamos también a contemplar los
efectos del Manto Azul de la gracia, vuestros estados de Éxtasis en vuestra
vida. Porque, acordaros: la Inteligencia de la Luz será siempre lo que se
manifestará, sin resistencia, como una evidencia. Esta evidencia transforma
vuestra vida y la transformará cada vez más. Aunque no tengáis conciencia, por
el hecho del establecimiento en esta Infinita Presencia (o a veces tengáis la
impresión de dormir, de dormiros, de no estar más ahí), vosotros estáis
totalmente ahí. Y es justamente vuestra Presencia, entera y total, aquí mismo en
lo que vosotros podríais llamar un estasis o un adormecimiento, que tiene
efectos muy importantes sobre vuestra vida y sobre el Éter de la
Tierra.
Así que la acción del Éxtasis, es ante todo, favorecer en los
Hermanos y Hermanas, el establecimiento de la Comunión y de eventuales Fusiones.
Esas Comuniones y esas Fusiones, más allá de demostraros que nosotros estamos lo
más cerca de vosotros y que nos acercamos cada día un poco más, tiene por objeto
realizar el Cielo sobre la Tierra y acabar con la ilusión. Desde que hayáis
aceptado no dar rienda suelta a vuestra mente, la personalidad, o lo que queda,
la acción de la Luz se hará cada vez más apremiante, los contactos en vuestro
Canal Marial serán también, cada vez más manifiestos y poderosos. El Éxtasis es
pues, la acción de la Luz más justa y la más pura para la humanidad. Si aceptáis
lo que digo, no para convertirlo en una creencia sino simplemente para vivir,
quizá más fácilmente, lo que tenéis que vivir, en relación al Éxtasis, podréis
ver claramente los efectos en vuestra vida. Porque el Éxtasis se va a manifestar
más allá de él mismo, en el despliegue de la vida ordinaria, en las tareas más
simples como en las más complejas. El Éxtasis va a terminar en esa Plenitud y
esta Alegría tan particular, que se instalará cada vez más profundamente y de
forma más y más constante. El Éxtasis no tiene ninguna necesidad de mostrar o
demostrar, porque es la demostración de la Luz. Yo diría incluso que no puede
haber realmente, Luz sin Samadhi, sin Paz, sin Éxtasis, de manera más importante
que simplemente en los momentos en que vosotros lo decidáis. Y por cierto, los
testimonios que os hemos aportado, algunas de mis Hermanas y yo misma, os han
explicado de cierta forma, que desde que el Éxtasis se estabiliza, se hace aun
más fácil obtener las informaciones, no sobre este mundo sino sobre la Verdad de
la Luz. Así funciona mi Hermana HILDEGARD DE BINGEN, por ejemplo. Ciertamente,
para la personalidad, esto no puede existir. Aquél que mire al exterior no puede
dudar un solo segundo de lo que pasa en los planos sutiles de la Tierra. Y por
tanto esta acción, como he dicho, es la más importante que os sea posible
manifestar.
El Éxtasis por otra parte, no puede durar, prolongarse, como habéis
constatado ciertamente, más que desde el instante en que la mente no interviene,
o cuando no busquéis la explicación de lo que se ha vivido. Y el Éxtasis en que
no hay ninguna visión, ninguna percepción, exceptuada esa conciencia que vive
Shantinilaya, es verdaderamente la cosa más importante para la Tierra, para
vosotros, para el conjunto de los Hermanos y Hermanas de la Tierra. Vivir el
Éxtasis os hace vivir también fuera de él mismo, un sentido más preciso de lo
que es del orden de la Luz o no. No para hacer cualquier juicio sino justamente
porque habiendo vivido el Éxtasis, sabéis pertinentemente que el Éxtasis ocurre
en el silencio, en los espacios donde no hay palabras, donde no hay voluntad,
donde no hay interacción con los Hermanos y Hermanas que no lo
experimentan.
El Éxtasis es por tanto, una obra, una obra capital sobre la Tierra,
porque pone fin también a todo lo que es efímero de la naturaleza humana, sin
que por eso sea una huída. El Éxtasis cambia los polos de interés, cambia
vuestra visión, ensancha vuestra mirada, transforma vuestro cuerpo, transforma
vuestra relación con la Luz, y esto es perceptible, incluso para vosotros. El
Éxtasis no es por tanto el proceso pasivo que se pueda imaginar, o si no, es la
pasividad total de la personalidad y la puesta en funcionamiento de todo lo que
es luminoso, eterno, no sometido al tiempo y al espacio. Es verdaderamente eso
lo que es importante. No es tanto tener visiones, acordarse de un pasado, sea el
que sea, no es tanto observar la Luz que se manifiesta a veces, detrás de
vuestros ojos. Eso no depende de otro ser humano que de vosotros mismos. El
Éxtasis conduce a acercaros a vuestra propia Ascensión, cuyo testimonio es el
mecanismo de estasis en que vuestro cuerpo parece, realmente desaparecer, donde
los pensamientos no tienen ya necesidad de estar ahí para daros el sentimiento
de existir, porque el Éxtasis os hace vivir mucho más allá de la existencia,
permaneciendo aquí, en este mundo.
El Éxtasis no debe jamás, ser considerado como una huída de vuestra
vida, como un conocimiento exterior. El Amor es Éxtasis, como la Luz. Cosa que
no conocerá jamás la personalidad. Así que ciertamente, para aquellos que no
viven y que no han seguido de una manera o de otra, lo que os hemos comunicado
(o, más allá de lo que hemos comunicado, sus propias Bodas Celestiales), va a
haber para esos Hermanos y esas Hermanas, una dificultad mayor, sin Éxtasis: es
la de creer que conociendo la Luz desde el exterior, conociendo las leyes de
este mundo, se crea una noción de camino, una noción de evolución. Y esta noción
de evolución va, desgraciadamente, a reforzar la distancia entre la conciencia
ordinaria y el Éxtasis mismo. Existe incluso, la posibilidad de guardar la Luz
vivida bajo el celemín (antigua unidad de medida de cereales), como una
forma de apropiación que por supuesto, no será jamás el Éxtasis, porque el
Éxtasis, como sabéis, corresponde a la Transparencia. Y esta Transparencia puede
seguir existiendo a pesar de la actividad. Por supuesto, esto no se hace de un
día para otro, sino lo más frecuentemente por una forma de aprendizaje que
proporciona el Éxtasis, donde tomáis realmente conciencia de lo que se
juega.
La respuesta por supuesto, va a depender de donde os situéis. Pero
recordad que el Éxtasis va a haceros vivir plenamente vuestra encarnación, no ya
en tanto que ser separado y cortado de la Luz sino, efectiva y concretamente,
conectado. Y toda la vida que se derive va a cambiar de forma mucho más
importante que lo que habéis podido vivir de manera individual. Los efectos del
Éxtasis se harán de alguna forma, cada vez más palpables en la Tierra como en
vosotros y en torno a vosotros. Por supuesto, la personalidad va a creer que el
Éxtasis va a impedir cumplir, como he dicho, vuestras obligaciones, sean las que
sean, pero esto es falso. El encantamiento en Éxtasis, no os retira de este
mundo, no por el momento, hasta el instante de la llamada colectiva de María.
Vuestro trabajo es capital, no el trabajo que os alimenta sino el Éxtasis que
alimenta a vuestros Hermanos y Hermanas. Sin ninguna voluntad personal y sin
tener la necesidad o la voluntad de actuar.
Instalarse en el Éxtasis y la Transparencia acrecienta la Luz en
torno a vosotros. Vuestra aura se transforma totalmente. Los tres Hogares emiten
permanentemente, haciéndoos gustar la Paz y la Alegría, en la tarea más ingrata
que tengáis quizá que realizar. Y si en vuestras vidas hay cosas aun que os
parecen difíciles de asumir (sea de forma afectiva o familiar, o profesional o
en cualquier otro dominio), constatareis cada vez más fácilmente, que el Éxtasis
viene a facilitar aun más vuestra vida. Seguro, son los momentos en que la Luz
os llama a extraeros del mundo, sea por el sueño por el propio Estasis, vivido y
percibido como tal. Esos momentos efectivamente, no os lo oculto, van a
multiplicarse. Pero es en esos momentos, si puedo decirlo, en que estáis llenos
de Luz, no para guardarla al abrigo, en vosotros, sino para retransmitirla, sin
ninguna voluntad y hacer bañar a la Tierra, a vuestros familiares y al conjunto
de Hermanos y Hermanas de la Tierra, en esta Luz. El Éxtasis es por tanto, todo
salvo la retirada del mundo. El Éxtasis es todo salvo la negación del mundo,
sino que es verdaderamente la espiritualización del mundo, de la materia. Ahí
está la Ascensión, no está en otra parte. Ningún conocimiento intelectual será
ningún seguro para la Ascensión. Lo que podáis practicar (como oración, como
meditación, como técnica) solo apunta en definitiva, a aproximaros y vivir lo
que acabo de decir. Olvidarse uno mismo en el Éxtasis, es encontrar el Amor en
su sentido no localizado, encontrar la Paz e irradiar resta Paz, sin ninguna
voluntad personal. Simplemente en este gozo particular del Éxtasis o lo que se
manifiesta, más allá de cualquier percepción, es la gracia dentro de la
Conciencia. Esto va a hacerse cada vez más perceptible, cada vez más evidente
desde el instante en que aceptáis, desde el instante en que acogéis la Onda del
Éxtasis. Esta puede aparecer (y aparecerá cada vez más fácilmente) tanto bajo la
acción de la Onda de Vida, como del Canal Marial y del Manto Azul de la gracia,
como por el Fuego del Corazón. Acordaros en los momentos en que esto parece
caeros encima, que hay una Llamada de la Luz y esta Llamada de la Luz va a
hacerse cada vez más apremiante. Pero la negación de esta luz, también va a
hacerse cada vez más importante, porque existen muchos Hermanos y Hermanas
condicionados y formateados por su itinerario espiritual, que ponen de antemano,
a causa de este itinerario , una distancia entre ellos y el Éxtasis.
El Éxtasis no depende de ningún conocimiento, de ningún estudio:
deriva del Abandono a la Luz y del Abandono del Sí. Porque la Luz al ser nuestra
esencia común, nuestra Unidad común, y nuestro Absoluto común, ya no puede
existir gradual o brutalmente, el sentido de competición para aquél que
experimenta el Éxtasis, sentido de jerarquía o de dirigir una organización. La
Luz os va a descubrir por el Éxtasis, la espontaneidad y la ligereza que no es
una huída sino una ligereza de vida, en que no hay ya lugar para el azar, donde
no hay lugar para el sufrimiento o las resistencias. La Alegría va pues, a
hacerse cada vez más accesible y la Paz cada vez más evidente. Es el refuerzo de
la Luz durante este tiempo que literalmente, como por un cambio de polaridad,
que efectivamente tendrá lugar en la Tierra, os hace también a vosotros, cambiar
de polaridad. Es decir que aunque las actividades continúen como antes, no lo
veis ya y no lo realizáis de la misma manera.
Como mi Hermana MA os ha dicho (ndr: MA ANANDA MOYI), veréis más y
más claramente, en vosotros y a vuestro alrededor, lo que releva del miedo y lo
que releva del Amor, no como un juicio exterior (ligado a lo que podéis ver con
vuestros ojos o oír con las palabras pronunciadas) sino más bien directamente,
de Corazón a Corazón. Y esto se traducirá por otra parte, por el refuerzo del
Sonido percibido en la oreja. Todo esto va a apareceros como más y más evidente.
Una vez más, aunque hay momentos en que precisamente ante esta evidencia, la
personalidad no puede más que preguntarse y frenar. Y es en esos momentos que
debéis reconectaros a vuestro propio Éxtasis. Y recordad que el Éxtasis actúa
sobre el conjunto de la Tierra, mucho más que lo que podríais hacer vosotros con
las palabras o con una acción. El Éxtasis es más importante que la acción
exterior, porque es la acción más grande. La Llamada de la Luz os va a pedir
vivir la gracia y, viviendo la gracia, las contrariedades de la personalidad que
pudieran pareceros insuperables, desaparecerán por sí mismas, sin llamar por
vuestra parte, a ninguna acción. Ahí está la gracia, no está en otra parte. La
gracia no depende de vosotros, depende de la acción de la Luz, en vosotros,
desde el instante en que la acogéis. Todo en vuestra vida se hará más fácil,
aunque los momentos de estasis puedan pareceros difícilmente compatibles con,
precisamente la vida ordinaria. Una vez efectuados los reajustes y el
equilibrado, veréis que no lo son. Vuestra vitalidad será profundamente
diferente, vuestras necesidades fisiológicas también cambiarán. Podréis entonces
medir de manera muy real, lo que se produce en vosotros y de igual forma, sobre
la Tierra.
El Arcángel MIGUEL os ha pedido reuniros, para el solsticio y para el
equinoccio, en el silencio, en el Éxtasis, sin Intención (ndr: ver su
intervención del 18 agosto en la rúbrica “mensajes para leer” donde evoca esta
próxima intervención del 22 septiembre 2012). La Inteligencia de la Luz actuará
de manera mucho más fácil, así sobre la humanidad, acercándola cada vez más a su
Liberación final. Por supuesto, aquél que ve esto con su personalidad no puede
ver más que una huída, una negación de la vida, porque el objetivo de la
personalidad es mantener y creer que simplemente, poniendo Luz ahí donde no hay,
las cosas van a ser más agradables en este mundo. Pero el objetivo no es ser
agradable en este mundo. El objetivo es restablecer la Verdad, restablecer el
reino de la Luz, no imaginando o suponiendo (en contra de lo que muchos Hermanos
y Hermanas creen) que la Luz va a cambiar todo y que la vida va a
continuar.
El que vive el Éxtasis, cada vez más fácilmente, se da cuenta de que
la Vida no está aquí. Como os han dicho por otra parte, aquellos que han vivido
las experiencias de muerte (sin ser por eso, místicos): la muerte, está aquí. Y
aunque la visión de la personalidad tiende a haceros creer que todo esto puede
cambiar, no es más que el miedo de la personalidad, de su propia desaparición lo
que se manifiesta. El que no ha ido a la Otra Orilla, como os decía HERMANO K,
no puede comprender nada y no puede aceptar nada del Éxtasis. Y por tanto, este
Hermano y esta Hermana que no pueden vivir nada de esto, están inscritos en el
miedo. Y como os decía mi Hermana MA ANANDA, solo hay el miedo o el Amor, el
resto no son más que ocupaciones y distracciones. Entonces, sea lo que os diga
vuestra mente, vuestro ego, os dirá que esto no sirve para nada, os dirá que hay
muchas más cosas que hacer remangándose. Os dirá que no estáis ya encarnados,
que no podéis ya hacer frente a las responsabilidades. Pero ¿dónde está vuestra
responsabilidad? ¿Está en relación a este mundo, o está en relación a la Luz? Es
una u otra. El bautismo de Fuego Celestial, del Fuego del Espíritu, viene a
demostraros eso. No hay pues, mejor posibilidad que aceptar la Llamada de la
Luz, que dejarse sumergir, no en la huída sino en la Plenitud de la Luz. Todo lo
demás se desarrolla por sí mismo. Entonces, aquél que está inscrito aun en la
personalidad, no lo juzguéis, porque os va a decir que hace falta remangarse,
que es necesario actuar concretamente. Pero nada hay más concreto que la acción
del Éxtasis. Todo depende también, de adonde miráis y de donde está vuestra
Conciencia. El Éxtasis os hace incluso crecer en Luz, crecer en Paz, crecer en
serenidad, una vez pasados los primeros momentos de duda y de interrogación. No
podréis negar más los efectos del Éxtasis, tanto en este cuerpo mismo como en
todos los aspectos de vuestra vida en esta Tierra.
La Unidad no impide la acción en la dualidad de la personalidad, sino
que la transciende. Hace feliz todo lo que hay que hacer, todo lo que hay que
realizar. No puede llevaros a otro sitio que a la Verdad, esa que es Absoluta.
Las verdades relativas se borran: las verdades relativas que conciernen a lo que
es temporal, efímero y que no dura. El Éxtasis os instala en la Eternidad, aquí
mismo, en la certeza y en la Alegría y cambia completamente el Éter de la
Tierra. Por supuesto, yo diría también que aquél que no lo vive, no puede saber,
no puede creerlo. Ahora, precisamente al vivirlo, no es una creencia, ni un
saber, es un estado en que la Alegría y el Amor están omnipresentes. Sea lo que
la personalidad pueda decir, sea lo que la mirada separada de los ojos diga, hay
subyacente esta Paz y esta Alegría. Las emociones os dejarán, la mente
desaparecerá. Así que, aquellos que han comenzado a vivir esto pueden
preguntarse cómo podrán hacer los cálculos, hacer las operaciones en vuestros
bancos, hacer cursos, hacer la comida. Pero eso no es verdad, no es más que un
periodo temporal e intermedio. Surgiréis siempre más grandes, más luminosos, más
amantes. Solo el ego puede creer lo contrario. La Inteligencia de la Luz no es
una palabra vacía y lo constataréis cada vez más, en vosotros puesto que como
ciertas Estrellas y algunos Ancianos os han dicho, todas las necesidades
cambian. Lo que os parecía vital antes, bajo la acción del Éxtasis, desaparece
como por encanto, de vuestra vida. Es lo mismo con los miedos que podían quedar,
ya que no puede haber miedo en el Amor. Y si el Éxtasis está ahí, el Amor está
ahí. Y por tanto el miedo no está ya ahí, o cada vez menos.
Responded a la Llamada de la Luz cuando os concierne individualmente.
No tergiverséis, no lo dejéis para otro momento, porque no sabéis cuando la Luz
os llamará. En esos momentos es cuando es necesario deciros: ¿qué es lo
importante? ¿Qué es mayor y capital para vosotros y para la Tierra? ¿Es llegar a
tal hora a tal lugar o por ejemplo, es querer a cualquier precio hacer una
comida a tal hora, obedecer las reglas, los límites, los marcos en los que
estáis la mayoría del tiempo, sujetos vosotros mismos, o es la Libertad? La Luz
os llama a la Libertad y a realizar vuestra Autonomía. Esto no es una marcha
egótica ni narcisismo, sino que es el verdadero servicio a la Luz. No está en
las obligaciones. El Servicio a la Luz no es conformarse a un objetivo al que
estáis atados, porque el único objetivo que debe de ahora en adelante, llenaros,
es ese de esa tranquilidad donde la Luz actúa. Os corresponde como siempre,
decidir si esto es vuestra verdad o no. Todo esto se realiza ahora, porque es la
preparación a la Ascensión colectiva de la humanidad. Como MIGUEL os ha dicho:
“los signos del Cielo y de la Tierra van a hacerse cada vez más evidentes”. Por
supuesto, el que rechace vivir ese Choque de la Humanidad (porque lo es), estará
en la negación. El que no quiere ver y no querrá ver, no lo juzguéis porque
incluso y os aparece como afirmado en su personalidad, esa afirmación no
representa más que el miedo, el miedo a su propia desaparición, a su disolución.
Como he dicho, para la personalidad, para vosotros, la vida está aquí pero esta
vida no es la verdadera Vida.
Todos lo que han pasado, como se ha dicho, del otro lado, os han
testimoniado que aquí estabais encerrados, encerrados en un cuerpo, en algo que
es denso, en que no hay ligereza y sobre todo, no hay Libertad. La verdadera
Libertad no es de este mundo pero debéis Liberar este mundo y eso pasa por el
Éxtasis, pasa por otra conciencia, otro estado que efectivamente, cada vez más,
parece haceros romper con las costumbres pasadas. Y es ahí donde hará falta
plantearos la cuestión de ¿cuál es la cosa más importante, para vosotros? ¿La
Luz o lo demás, todo lo demás? Y será necesario responder a esta ecuación, a
esta demanda. Si queréis apropiaros de la Luz, simplemente para salpimentar
vuestra vida de Luz, para enmascarar el miedo, la Luz se os escapará. Si asentís
a la Luz, el Amor os llenará y llenará el mundo. Es el desafío que tenéis que
vivir todos, en grados diversos y en momentos diversos. Y constataréis también
que, cualquiera que sea el desorden del mundo, aunque existan en vosotros
pequeños desórdenes, el Amor, la Luz será mucho más poderoso que todos los
desarreglos de este mundo. Pero aun es necesario hacer la elección de la Luz, no
como una elección de destino, no como un destino final, sino más bien en lo que
es aceptado vivir o rechazado vivir. Como siempre, vosotros sois el único
maestro a bordo en este vehículo, en vuestra conciencia. No escuchéis a nadie,
no escuchéis más que lo que os dice la Luz. Si os pide pararos al borde de la
carretera, hacedlo. Si os pide meteros en la cama el tiempo necesario, hacedlo.
No hay obligación que se mantenga ante la Verdad de la Luz o si no, significa
simplemente que no querréis más que ser salpimentado de Luz y continuar vuestra
vida ordinaria, sin cambiar nada, aunque reclaméis y supliquéis la Luz. Estáis
cara a vuestras propias responsabilidades y ahí está el Choque de la Humanidad.
Asentid a la Luz ¿dónde estáis en el miedo y la negación? No habrá otra
alternativa y cada uno es libre de vivir eso para lo que ha venido a esta
Tierra, en este tiempo. Pero más y más, como decían MARÍA y MA (ndr: MA ANANDA
MOYI), no podréis vivir el miedo y el Amor. Será lo uno o lo otro.
No os inquietéis (como se ha dicho y repito ahora) para aquellos que
por el momento, no parecen vivir ni ser afectados por este proceso. Contentaos
viviendo lo que la Luz os pide a vosotros, estando atento a vuestro objetivo. La
verdadera Vida os va a aparecer como algo que no es de este mundo, pero mientras
que no lo viváis, no sirve de nada decíroslo. Simplemente, como diría BIDI,
refutar ese Efímero da ya es un apoyo a la apertura de la Puerta hacia la
Eternidad. No dudéis vivir cada vez más intensamente la Luz, sin restricción y
sin freno, y sobre todo, sin miedo. No tenéis otra solución que resistir o
Abandonaros totalmente, mantener una identidad o aceptar perder esta identidad,
no para el vacío sino para el Lleno y la Plenitud. Esto puede efectivamente
plantear un pequeño problema para la personalidad, puesto que a ese nivel hay
una elección crucial: la Resurrección o la no Resurrección, la aceptación o el
rechazo.
Por supuesto, hasta el presente era fácil decir que buscabais la luz,
que estabais en el camino espiritual, que purificabais lo que llamáis Karma, que
evolucionabais. Pero la Luz no es una evolución. El Amor no es una evolución.
Como se dijo ayer, es una transubstanciación: es el Pasaje de la oruga a
mariposa. La oruga es efímera, la oruga como se ha dicho, no conoce a la
mariposa. En este nivel hay que hacer un acto de Abandono. Entonces nosotros
somos también conscientes de que según vuestra historia personal, los miedos
están quizá más o menos ahí, son más o menos intensos. Acordaros en los momentos
en que el miedo se manifieste o si no, en los momentos en que dudéis, que
vuestra Esencia es Luz y que la Luz está mucho más allá de ese género de
cuestionamientos, de preguntas. Llamadnos, os ayudaremos, en esos momentos. Si
aparecen síntomas en el cuerpo, si aparecen visiones, si hay manifestaciones en
este cuerpo o en vuestros cuerpos sutiles, en los momentos de Éxtasis o de
Estasis, no os preocupéis, id más allá. La Luz sabe lo que tiene que hacer.
Vuestras resistencias reforzarán las manifestaciones, los dolores u otras cosas.
El Abandono del Sí y el Abandono a la Luz os harán constatar muy rápido, por
vosotros mismos, si esto se vive, que los únicos elementos que pueden impediros
vivirlo eran los miedos, no hay otro fundamento. Viviendo el Éxtasis, viviendo
Shantinilaya y viviendo el Absoluto, podréis efectivamente, constatar por
vosotros mismos, que de hecho esto siempre ha estado ahí y que solo los
mecanismos del pensamiento, los mecanismos de adhesión a creencias, diversas y
variadas, os habían impedido vivir y ver más allá de cualquier visión. Pararé
aquí mis palabras. Permitidme permanecer con vosotros en silencio, unos
instantes, sin desear nada, sin pedir nada, sin evocar siquiera Comunión u otra
cosa: simplemente Presente a vosotros mismos, Presente a cada uno de nosotros,
aquí.
…Compartiendo el Don de la gracia…
Y acordaros también, que todos los placeres de este mundo, sean los
que sean, solo pueden ser efímeros. El placer de la Luz es Eterno y Eternidad:
es mucho más vasto que el placer de la satisfacción de lo que sea. Esto es una
certeza, desde el instante en que lo aceptáis, porque lo viviréis. Estáis aquí
por eso. Yo terminaré con estas frases: todo lo que nace de la carne es
perecedero y efímero. Solo el Espíritu es Eterno y vosotros Sois ante todo,
Espíritu. Prisioneros en una carne que es necesario por tanto, llevarla también
a su Libertad.
Yo soy GEMMA GALGANI, os Amo. Vosotros sois yo, como yo soy vosotros:
la Unidad del Amor, en una multiplicidad de apariencias. La Unidad de la Luz. La
Alegría de la Luz. Os digo hasta la próxima vez. Que la Luz sea vuestra Morada.
Que la Paz sea en vosotros a cada aliento. Hasta pronto.
GEMMA GALGANI 19 agosto 2012
Soy GEMMA GALGANI. Hermanos y Hermanas, dignaos recibir todo mi Amor. Vengo a vosotros
en tanto que relevo del Manto Azul de la gracia y voy a intentar expresar por
mis palabras y mi Presencia, al mismo tiempo, en vosotros y a vuestro lado, lo
que significa esta simple expresión: el Éxtasis en acción. Voy a intentar
haceros entender, mediante las palabras y la conciencia, en qué el Éxtasis en sí
mismo, es ciertamente la acción más importante que pueda haber sobre este mundo.
Como se dijo (y quizá os acordáis) existen actualmente, encarnadas en esta
Tierra, tres Estrellas. Han existido en todo tiempo, cierto número de Estrellas
encarnadas, cierto número de Ancianos e incluso cuando nuestras presencias no
han sido conocidas por el mundo, nuestra acción, por nuestra presencia y nuestro
Éxtasis, ha mantenido de alguna forma, la conexión a la Fuente y a la Luz, no
solamente para nosotros sino por supuesto, para toda la humanidad. Hace mucho
tiempo, con la creación de la Atlántida, hizo falta mantener esta conexión. Por
supuesto, el Hermano o Hermana que observa un Éxtasis desde el exterior, si se
puede decir, con la mirada de la razón, con la conciencia de la personalidad,
verá muy frecuentemente (y sobre todo si no hay percepción de la Vibración de la
energía y de la conciencia), solo una pérdida de tiempo, más que una persona que
está en otra parte que encarnada. Y sin embargo, si pudierais ver lo que pasa en
los planos que os son invisibles, sobre los Éteres más elevados de la Tierra,
constataríais por vosotros mismos, que esta acción del Éxtasis en sí misma viene
literalmente a bañar el Éter invisible en la Luz.
El Éxtasis no se vive jamás para sí. Tiene siempre una implicación
mayor, que es mantener la conexión a la Luz y permitir a esta Luz, estar
presente en el Éter de la Tierra, aunque sea invisible a la personalidad,
invisible a la mirada. Por supuesto, la conciencia habitual y ordinaria de la
encarnación, no puede captar la acción del Éxtasis y la personalidad tendrá
siempre tendencia a ver una huída de la realidad, una pérdida de tiempo o todo
lo más, un proceso que no permite vivir su vida. Es ciertamente diferente para
aquél cuya conciencia no está ya instalada en la personalidad, sino que está
presente dentro de Sí, es Absoluto, porque en esos momentos, la percepción de la
energía se hace clara. Existe por otra parte, y sobre todo en nuestros Hermanos
orientales, posibilidades de ceremonia dirigida a hacer Comunicar este Éxtasis a
todos los Hermanos y Hermanas que asisten, más allá de la asistencia, la acción
del Éxtasis es mucho más importante. El Éxtasis refuerza esta unión, esta
conexión a la Luz y mantiene este vínculo. Así pues, lo que posiblemente habéis
realizado como rol de Ancla, de Sembrador de Luz y ahora Liberador de la Tierra,
vuestra acción más fundamental es la que se desarrolla sobre los planos que os
son invisibles.
Entonces el Éxtasis procura como se ha dicho, la Alegría, el estado
de gracia, Shantinilaya, los Samadhi. El Éxtasis más puro es el que no se
acompaña de ninguna percepción de otra cosa que el propio Éxtasis. El Éxtasis en
que no hay ni visión, ni percepción, no hay nada más que el Amor más puro,
independientemente de cualquier visión, de cualquier memoria y de cualquier
identidad. Es este Éxtasis (sea dentro de la Infinita Presencia o del Absoluto)
el que tiene la acción más grande y la más importante sobre el Éter de la
Tierra. Por supuesto, existen efectos Interiores pero si este Éxtasis fuera
simplemente ese efecto interior, habría efectivamente en ese caso concreto, una
visión y un estado personal que no tendría ningún interés para el resto de la
humanidad. El interés del Éxtasis, si puedo decirlo, no es tanto vivirlo uno
mismo, sino más bien, crear esta Luz en el Éter de la Tierra. Los efectos
perceptibles para aquél que lo vive son ciertamente importantes, pero lo son aun
más para la Tierra. El conjunto de la humanidad se beneficia, aunque no tengan
conciencia, aunque no lo perciban, aunque lo rechacen, porque el Éter de la
Tierra que ha sido alterado no contiene todavía toda la Luz que hubiera debido
haber, como en los Universos Unificados.
Sean las Estrellas, los Ancianos o los místicos, el estado de Éxtasis
no es propiamente hablando, una meditación o una voluntad sino más bien,
precisamente, la desaparición misma de la intención de meditar, la desaparición
de la propia persona. Y esta desaparición, es precisamente, lo que va a permitir
servir al conjunto de la humanidad, de manera mucho más importante que cualquier
otra acción. Así que, mientras la mente está aun presente y no ha sido sometida
(por el Supramental, por la Luz, por el CRISTO), esto puede representar, incluso
para aquellos que lo viven, un sentimiento de inutilidad. Y lo propio del
Éxtasis (sobre todo cuando éste se hace cada vez más importante, invasor,
percutor incluso) puede traducirse cuando desaparece, por un sentimiento de
carencia. Vivir Shantinilaya, y retornar luego a la personalidad, puede dejar en
los primeros tiempos, un sentimiento de ausencia y a veces incluso de tristeza.
No debéis que inquietaros. El refuerzo de vuestros momentos de ausencia, el
reforzamiento de lo que pasa en vuestro cuerpo y en vuestra conciencia, puede
dejaros a veces, cuando esto se atenúa y desaparece, un sentimiento de vacío y
de ausencia, traduciéndose entonces por la duda, por la intervención de la
razón. Esto forma parte, yo diría, de un proceso normal. Y esas oscilaciones del
humor, esas oscilaciones de la propia conciencia, esos pasajes que se efectúan
entre la personalidad y el Sí (y, si se vive, entre el Sí y el Absoluto) os
permiten precisamente (más allá del humor del momento, cuando esto desaparece),
daros cuenta por vosotros mismos, del sentimiento de completitud total que se
manifestará con el Éxtasis. Pero lo más importante no es eso. Porque la obra de
servicio más importante es ciertamente lo que pasa precisamente, a nivel del
Éter de la Tierra y no solamente en vosotros. La acción del Éxtasis es ante
todo, reforzar la propia Vibración la cantidad de Partículas Adamantinas y la
posibilidad de abrir, yo diría, ciertos canales interdimensionales que todos
nuestros Hermanos y Hermanas, pueden extraer. Existe pues, un efecto acumulativo
y como habéis notado y como nosotros os hemos dicho, lo que habéis realizado ha
permitido reducir los tiempos de la Tribulación. Esto ha sido un gran beneficio.
Y como os dijo MARÍA hace pocos días (ndr: su intervención del 15 agosto),
cuanto más dure este tiempo, más debéis regocijaros, porque eso da la
oportunidad de llenar el Éter de la Tierra de más y más Luz, de responder a la
Onda de Vida por vuestro propio estado, y eso es lo más importante. Es eso lo
que permite a un número cada vez más grande de Hermanos y Hermanas conectarse al
Supramental, conectarse a nivel del Corazón.
La acción del Éxtasis no es una pasividad, no es retirarse del mundo,
no es una huída de la realidad, sino más bien el establecimiento de una nueva
realidad. El mejor de los servicios es a ese nivel. Entonces, vosotros mismos,
cuando salgáis (si lo vivís) más allá de la nostalgia del Éxtasis que estaba ahí
unos minutos antes, puede manifestarse un humor pesimista o una idea que intenta
deciros: “¿para qué?”. Justificando el hecho de que tenéis actividades, tareas
que hacer, obligaciones que realizar. Pero cuanto más crezcáis en el Éxtasis
podréis realizar lo que tenéis que realizar, en el mismo estado. Y algunos de
vosotros, sea ahora, sea muy próximamente, vais a daros cuenta de que el Éxtasis
no se detiene al salir de él, y que los efectos, los beneficios (para vosotros y
para el conjunto de vuestros Hermanos y Hermanas, donde estén) van a reforzarse.
Vais a observar que, en ese estado, sois capaces de hacer y de llevar a buen fin
vuestras actividades destacando y sin hacer esfuerzo, sin estar en un estado
mental negativo o contrariado. El aprendizaje del Éxtasis, su repetición es
ciertamente para vosotros como para la Tierra y todos sus habitantes, una acción
potente que puede darse aunque sea invisible al exterior. Y es por cierto,
vuestro trabajo de Ancla y Sembrador de Luz, lo que de alguna forma, ha
suprimido las dificultades, lo que hace que las cosas por el momento, pasen más
suavemente que lo que los profetas anunciaron.
El Éxtasis en acción es la voluntad de la Luz, ya no es vuestra
voluntad personal. Y esta voluntad de la Luz es Inteligencia, porque sabe
pertinentemente lo que realiza, como si de alguna forma la propia Luz fuera
consciente: consciencia actuante, consciencia activa. Y además, aquellos de
vosotros que alcanzan esos estados y los vivan, se dan cuenta muy bien de que a
veces, más allá de las fluctuaciones del humor, los mecanismos generales de
vuestra vida son diferentes. Esto contribuye a estableceros en el desapego, os
permite ver más claro las particularidades de este mundo, como de todos los
seres humanos con los que estáis en contacto, sea agradable o desagradable. Esta
claridad, esta Transparencia, es como si mirarais de otra forma y percibierais
de otra forma lo que se despliega en vosotros, como lo que se despliega a
vuestro alrededor o en el planeta.
Vivir el Éxtasis no es ni una huída, ni una meditación. Vivir las
Comuniones con nosotros permite elevar lo que sois y elevar a la Tierra misma.
Es en ese sentido que los Ancianos os han dicho de manteneros Tranquilos. Es en
ese sentido que nosotras las Estrellas, os invitamos también a contemplar los
efectos del Manto Azul de la gracia, vuestros estados de Éxtasis en vuestra
vida. Porque, acordaros: la Inteligencia de la Luz será siempre lo que se
manifestará, sin resistencia, como una evidencia. Esta evidencia transforma
vuestra vida y la transformará cada vez más. Aunque no tengáis conciencia, por
el hecho del establecimiento en esta Infinita Presencia (o a veces tengáis la
impresión de dormir, de dormiros, de no estar más ahí), vosotros estáis
totalmente ahí. Y es justamente vuestra Presencia, entera y total, aquí mismo en
lo que vosotros podríais llamar un estasis o un adormecimiento, que tiene
efectos muy importantes sobre vuestra vida y sobre el Éter de la
Tierra.
Así que la acción del Éxtasis, es ante todo, favorecer en los
Hermanos y Hermanas, el establecimiento de la Comunión y de eventuales Fusiones.
Esas Comuniones y esas Fusiones, más allá de demostraros que nosotros estamos lo
más cerca de vosotros y que nos acercamos cada día un poco más, tiene por objeto
realizar el Cielo sobre la Tierra y acabar con la ilusión. Desde que hayáis
aceptado no dar rienda suelta a vuestra mente, la personalidad, o lo que queda,
la acción de la Luz se hará cada vez más apremiante, los contactos en vuestro
Canal Marial serán también, cada vez más manifiestos y poderosos. El Éxtasis es
pues, la acción de la Luz más justa y la más pura para la humanidad. Si aceptáis
lo que digo, no para convertirlo en una creencia sino simplemente para vivir,
quizá más fácilmente, lo que tenéis que vivir, en relación al Éxtasis, podréis
ver claramente los efectos en vuestra vida. Porque el Éxtasis se va a manifestar
más allá de él mismo, en el despliegue de la vida ordinaria, en las tareas más
simples como en las más complejas. El Éxtasis va a terminar en esa Plenitud y
esta Alegría tan particular, que se instalará cada vez más profundamente y de
forma más y más constante. El Éxtasis no tiene ninguna necesidad de mostrar o
demostrar, porque es la demostración de la Luz. Yo diría incluso que no puede
haber realmente, Luz sin Samadhi, sin Paz, sin Éxtasis, de manera más importante
que simplemente en los momentos en que vosotros lo decidáis. Y por cierto, los
testimonios que os hemos aportado, algunas de mis Hermanas y yo misma, os han
explicado de cierta forma, que desde que el Éxtasis se estabiliza, se hace aun
más fácil obtener las informaciones, no sobre este mundo sino sobre la Verdad de
la Luz. Así funciona mi Hermana HILDEGARD DE BINGEN, por ejemplo. Ciertamente,
para la personalidad, esto no puede existir. Aquél que mire al exterior no puede
dudar un solo segundo de lo que pasa en los planos sutiles de la Tierra. Y por
tanto esta acción, como he dicho, es la más importante que os sea posible
manifestar.
El Éxtasis por otra parte, no puede durar, prolongarse, como habéis
constatado ciertamente, más que desde el instante en que la mente no interviene,
o cuando no busquéis la explicación de lo que se ha vivido. Y el Éxtasis en que
no hay ninguna visión, ninguna percepción, exceptuada esa conciencia que vive
Shantinilaya, es verdaderamente la cosa más importante para la Tierra, para
vosotros, para el conjunto de los Hermanos y Hermanas de la Tierra. Vivir el
Éxtasis os hace vivir también fuera de él mismo, un sentido más preciso de lo
que es del orden de la Luz o no. No para hacer cualquier juicio sino justamente
porque habiendo vivido el Éxtasis, sabéis pertinentemente que el Éxtasis ocurre
en el silencio, en los espacios donde no hay palabras, donde no hay voluntad,
donde no hay interacción con los Hermanos y Hermanas que no lo
experimentan.
El Éxtasis es por tanto, una obra, una obra capital sobre la Tierra,
porque pone fin también a todo lo que es efímero de la naturaleza humana, sin
que por eso sea una huída. El Éxtasis cambia los polos de interés, cambia
vuestra visión, ensancha vuestra mirada, transforma vuestro cuerpo, transforma
vuestra relación con la Luz, y esto es perceptible, incluso para vosotros. El
Éxtasis no es por tanto el proceso pasivo que se pueda imaginar, o si no, es la
pasividad total de la personalidad y la puesta en funcionamiento de todo lo que
es luminoso, eterno, no sometido al tiempo y al espacio. Es verdaderamente eso
lo que es importante. No es tanto tener visiones, acordarse de un pasado, sea el
que sea, no es tanto observar la Luz que se manifiesta a veces, detrás de
vuestros ojos. Eso no depende de otro ser humano que de vosotros mismos. El
Éxtasis conduce a acercaros a vuestra propia Ascensión, cuyo testimonio es el
mecanismo de estasis en que vuestro cuerpo parece, realmente desaparecer, donde
los pensamientos no tienen ya necesidad de estar ahí para daros el sentimiento
de existir, porque el Éxtasis os hace vivir mucho más allá de la existencia,
permaneciendo aquí, en este mundo.
El Éxtasis no debe jamás, ser considerado como una huída de vuestra
vida, como un conocimiento exterior. El Amor es Éxtasis, como la Luz. Cosa que
no conocerá jamás la personalidad. Así que ciertamente, para aquellos que no
viven y que no han seguido de una manera o de otra, lo que os hemos comunicado
(o, más allá de lo que hemos comunicado, sus propias Bodas Celestiales), va a
haber para esos Hermanos y esas Hermanas, una dificultad mayor, sin Éxtasis: es
la de creer que conociendo la Luz desde el exterior, conociendo las leyes de
este mundo, se crea una noción de camino, una noción de evolución. Y esta noción
de evolución va, desgraciadamente, a reforzar la distancia entre la conciencia
ordinaria y el Éxtasis mismo. Existe incluso, la posibilidad de guardar la Luz
vivida bajo el celemín (antigua unidad de medida de cereales), como una
forma de apropiación que por supuesto, no será jamás el Éxtasis, porque el
Éxtasis, como sabéis, corresponde a la Transparencia. Y esta Transparencia puede
seguir existiendo a pesar de la actividad. Por supuesto, esto no se hace de un
día para otro, sino lo más frecuentemente por una forma de aprendizaje que
proporciona el Éxtasis, donde tomáis realmente conciencia de lo que se
juega.
La respuesta por supuesto, va a depender de donde os situéis. Pero
recordad que el Éxtasis va a haceros vivir plenamente vuestra encarnación, no ya
en tanto que ser separado y cortado de la Luz sino, efectiva y concretamente,
conectado. Y toda la vida que se derive va a cambiar de forma mucho más
importante que lo que habéis podido vivir de manera individual. Los efectos del
Éxtasis se harán de alguna forma, cada vez más palpables en la Tierra como en
vosotros y en torno a vosotros. Por supuesto, la personalidad va a creer que el
Éxtasis va a impedir cumplir, como he dicho, vuestras obligaciones, sean las que
sean, pero esto es falso. El encantamiento en Éxtasis, no os retira de este
mundo, no por el momento, hasta el instante de la llamada colectiva de María.
Vuestro trabajo es capital, no el trabajo que os alimenta sino el Éxtasis que
alimenta a vuestros Hermanos y Hermanas. Sin ninguna voluntad personal y sin
tener la necesidad o la voluntad de actuar.
Instalarse en el Éxtasis y la Transparencia acrecienta la Luz en
torno a vosotros. Vuestra aura se transforma totalmente. Los tres Hogares emiten
permanentemente, haciéndoos gustar la Paz y la Alegría, en la tarea más ingrata
que tengáis quizá que realizar. Y si en vuestras vidas hay cosas aun que os
parecen difíciles de asumir (sea de forma afectiva o familiar, o profesional o
en cualquier otro dominio), constatareis cada vez más fácilmente, que el Éxtasis
viene a facilitar aun más vuestra vida. Seguro, son los momentos en que la Luz
os llama a extraeros del mundo, sea por el sueño por el propio Estasis, vivido y
percibido como tal. Esos momentos efectivamente, no os lo oculto, van a
multiplicarse. Pero es en esos momentos, si puedo decirlo, en que estáis llenos
de Luz, no para guardarla al abrigo, en vosotros, sino para retransmitirla, sin
ninguna voluntad y hacer bañar a la Tierra, a vuestros familiares y al conjunto
de Hermanos y Hermanas de la Tierra, en esta Luz. El Éxtasis es por tanto, todo
salvo la retirada del mundo. El Éxtasis es todo salvo la negación del mundo,
sino que es verdaderamente la espiritualización del mundo, de la materia. Ahí
está la Ascensión, no está en otra parte. Ningún conocimiento intelectual será
ningún seguro para la Ascensión. Lo que podáis practicar (como oración, como
meditación, como técnica) solo apunta en definitiva, a aproximaros y vivir lo
que acabo de decir. Olvidarse uno mismo en el Éxtasis, es encontrar el Amor en
su sentido no localizado, encontrar la Paz e irradiar resta Paz, sin ninguna
voluntad personal. Simplemente en este gozo particular del Éxtasis o lo que se
manifiesta, más allá de cualquier percepción, es la gracia dentro de la
Conciencia. Esto va a hacerse cada vez más perceptible, cada vez más evidente
desde el instante en que aceptáis, desde el instante en que acogéis la Onda del
Éxtasis. Esta puede aparecer (y aparecerá cada vez más fácilmente) tanto bajo la
acción de la Onda de Vida, como del Canal Marial y del Manto Azul de la gracia,
como por el Fuego del Corazón. Acordaros en los momentos en que esto parece
caeros encima, que hay una Llamada de la Luz y esta Llamada de la Luz va a
hacerse cada vez más apremiante. Pero la negación de esta luz, también va a
hacerse cada vez más importante, porque existen muchos Hermanos y Hermanas
condicionados y formateados por su itinerario espiritual, que ponen de antemano,
a causa de este itinerario , una distancia entre ellos y el Éxtasis.
El Éxtasis no depende de ningún conocimiento, de ningún estudio:
deriva del Abandono a la Luz y del Abandono del Sí. Porque la Luz al ser nuestra
esencia común, nuestra Unidad común, y nuestro Absoluto común, ya no puede
existir gradual o brutalmente, el sentido de competición para aquél que
experimenta el Éxtasis, sentido de jerarquía o de dirigir una organización. La
Luz os va a descubrir por el Éxtasis, la espontaneidad y la ligereza que no es
una huída sino una ligereza de vida, en que no hay ya lugar para el azar, donde
no hay lugar para el sufrimiento o las resistencias. La Alegría va pues, a
hacerse cada vez más accesible y la Paz cada vez más evidente. Es el refuerzo de
la Luz durante este tiempo que literalmente, como por un cambio de polaridad,
que efectivamente tendrá lugar en la Tierra, os hace también a vosotros, cambiar
de polaridad. Es decir que aunque las actividades continúen como antes, no lo
veis ya y no lo realizáis de la misma manera.
Como mi Hermana MA os ha dicho (ndr: MA ANANDA MOYI), veréis más y
más claramente, en vosotros y a vuestro alrededor, lo que releva del miedo y lo
que releva del Amor, no como un juicio exterior (ligado a lo que podéis ver con
vuestros ojos o oír con las palabras pronunciadas) sino más bien directamente,
de Corazón a Corazón. Y esto se traducirá por otra parte, por el refuerzo del
Sonido percibido en la oreja. Todo esto va a apareceros como más y más evidente.
Una vez más, aunque hay momentos en que precisamente ante esta evidencia, la
personalidad no puede más que preguntarse y frenar. Y es en esos momentos que
debéis reconectaros a vuestro propio Éxtasis. Y recordad que el Éxtasis actúa
sobre el conjunto de la Tierra, mucho más que lo que podríais hacer vosotros con
las palabras o con una acción. El Éxtasis es más importante que la acción
exterior, porque es la acción más grande. La Llamada de la Luz os va a pedir
vivir la gracia y, viviendo la gracia, las contrariedades de la personalidad que
pudieran pareceros insuperables, desaparecerán por sí mismas, sin llamar por
vuestra parte, a ninguna acción. Ahí está la gracia, no está en otra parte. La
gracia no depende de vosotros, depende de la acción de la Luz, en vosotros,
desde el instante en que la acogéis. Todo en vuestra vida se hará más fácil,
aunque los momentos de estasis puedan pareceros difícilmente compatibles con,
precisamente la vida ordinaria. Una vez efectuados los reajustes y el
equilibrado, veréis que no lo son. Vuestra vitalidad será profundamente
diferente, vuestras necesidades fisiológicas también cambiarán. Podréis entonces
medir de manera muy real, lo que se produce en vosotros y de igual forma, sobre
la Tierra.
El Arcángel MIGUEL os ha pedido reuniros, para el solsticio y para el
equinoccio, en el silencio, en el Éxtasis, sin Intención (ndr: ver su
intervención del 18 agosto en la rúbrica “mensajes para leer” donde evoca esta
próxima intervención del 22 septiembre 2012). La Inteligencia de la Luz actuará
de manera mucho más fácil, así sobre la humanidad, acercándola cada vez más a su
Liberación final. Por supuesto, aquél que ve esto con su personalidad no puede
ver más que una huída, una negación de la vida, porque el objetivo de la
personalidad es mantener y creer que simplemente, poniendo Luz ahí donde no hay,
las cosas van a ser más agradables en este mundo. Pero el objetivo no es ser
agradable en este mundo. El objetivo es restablecer la Verdad, restablecer el
reino de la Luz, no imaginando o suponiendo (en contra de lo que muchos Hermanos
y Hermanas creen) que la Luz va a cambiar todo y que la vida va a
continuar.
El que vive el Éxtasis, cada vez más fácilmente, se da cuenta de que
la Vida no está aquí. Como os han dicho por otra parte, aquellos que han vivido
las experiencias de muerte (sin ser por eso, místicos): la muerte, está aquí. Y
aunque la visión de la personalidad tiende a haceros creer que todo esto puede
cambiar, no es más que el miedo de la personalidad, de su propia desaparición lo
que se manifiesta. El que no ha ido a la Otra Orilla, como os decía HERMANO K,
no puede comprender nada y no puede aceptar nada del Éxtasis. Y por tanto, este
Hermano y esta Hermana que no pueden vivir nada de esto, están inscritos en el
miedo. Y como os decía mi Hermana MA ANANDA, solo hay el miedo o el Amor, el
resto no son más que ocupaciones y distracciones. Entonces, sea lo que os diga
vuestra mente, vuestro ego, os dirá que esto no sirve para nada, os dirá que hay
muchas más cosas que hacer remangándose. Os dirá que no estáis ya encarnados,
que no podéis ya hacer frente a las responsabilidades. Pero ¿dónde está vuestra
responsabilidad? ¿Está en relación a este mundo, o está en relación a la Luz? Es
una u otra. El bautismo de Fuego Celestial, del Fuego del Espíritu, viene a
demostraros eso. No hay pues, mejor posibilidad que aceptar la Llamada de la
Luz, que dejarse sumergir, no en la huída sino en la Plenitud de la Luz. Todo lo
demás se desarrolla por sí mismo. Entonces, aquél que está inscrito aun en la
personalidad, no lo juzguéis, porque os va a decir que hace falta remangarse,
que es necesario actuar concretamente. Pero nada hay más concreto que la acción
del Éxtasis. Todo depende también, de adonde miráis y de donde está vuestra
Conciencia. El Éxtasis os hace incluso crecer en Luz, crecer en Paz, crecer en
serenidad, una vez pasados los primeros momentos de duda y de interrogación. No
podréis negar más los efectos del Éxtasis, tanto en este cuerpo mismo como en
todos los aspectos de vuestra vida en esta Tierra.
La Unidad no impide la acción en la dualidad de la personalidad, sino
que la transciende. Hace feliz todo lo que hay que hacer, todo lo que hay que
realizar. No puede llevaros a otro sitio que a la Verdad, esa que es Absoluta.
Las verdades relativas se borran: las verdades relativas que conciernen a lo que
es temporal, efímero y que no dura. El Éxtasis os instala en la Eternidad, aquí
mismo, en la certeza y en la Alegría y cambia completamente el Éter de la
Tierra. Por supuesto, yo diría también que aquél que no lo vive, no puede saber,
no puede creerlo. Ahora, precisamente al vivirlo, no es una creencia, ni un
saber, es un estado en que la Alegría y el Amor están omnipresentes. Sea lo que
la personalidad pueda decir, sea lo que la mirada separada de los ojos diga, hay
subyacente esta Paz y esta Alegría. Las emociones os dejarán, la mente
desaparecerá. Así que, aquellos que han comenzado a vivir esto pueden
preguntarse cómo podrán hacer los cálculos, hacer las operaciones en vuestros
bancos, hacer cursos, hacer la comida. Pero eso no es verdad, no es más que un
periodo temporal e intermedio. Surgiréis siempre más grandes, más luminosos, más
amantes. Solo el ego puede creer lo contrario. La Inteligencia de la Luz no es
una palabra vacía y lo constataréis cada vez más, en vosotros puesto que como
ciertas Estrellas y algunos Ancianos os han dicho, todas las necesidades
cambian. Lo que os parecía vital antes, bajo la acción del Éxtasis, desaparece
como por encanto, de vuestra vida. Es lo mismo con los miedos que podían quedar,
ya que no puede haber miedo en el Amor. Y si el Éxtasis está ahí, el Amor está
ahí. Y por tanto el miedo no está ya ahí, o cada vez menos.
Responded a la Llamada de la Luz cuando os concierne individualmente.
No tergiverséis, no lo dejéis para otro momento, porque no sabéis cuando la Luz
os llamará. En esos momentos es cuando es necesario deciros: ¿qué es lo
importante? ¿Qué es mayor y capital para vosotros y para la Tierra? ¿Es llegar a
tal hora a tal lugar o por ejemplo, es querer a cualquier precio hacer una
comida a tal hora, obedecer las reglas, los límites, los marcos en los que
estáis la mayoría del tiempo, sujetos vosotros mismos, o es la Libertad? La Luz
os llama a la Libertad y a realizar vuestra Autonomía. Esto no es una marcha
egótica ni narcisismo, sino que es el verdadero servicio a la Luz. No está en
las obligaciones. El Servicio a la Luz no es conformarse a un objetivo al que
estáis atados, porque el único objetivo que debe de ahora en adelante, llenaros,
es ese de esa tranquilidad donde la Luz actúa. Os corresponde como siempre,
decidir si esto es vuestra verdad o no. Todo esto se realiza ahora, porque es la
preparación a la Ascensión colectiva de la humanidad. Como MIGUEL os ha dicho:
“los signos del Cielo y de la Tierra van a hacerse cada vez más evidentes”. Por
supuesto, el que rechace vivir ese Choque de la Humanidad (porque lo es), estará
en la negación. El que no quiere ver y no querrá ver, no lo juzguéis porque
incluso y os aparece como afirmado en su personalidad, esa afirmación no
representa más que el miedo, el miedo a su propia desaparición, a su disolución.
Como he dicho, para la personalidad, para vosotros, la vida está aquí pero esta
vida no es la verdadera Vida.
Todos lo que han pasado, como se ha dicho, del otro lado, os han
testimoniado que aquí estabais encerrados, encerrados en un cuerpo, en algo que
es denso, en que no hay ligereza y sobre todo, no hay Libertad. La verdadera
Libertad no es de este mundo pero debéis Liberar este mundo y eso pasa por el
Éxtasis, pasa por otra conciencia, otro estado que efectivamente, cada vez más,
parece haceros romper con las costumbres pasadas. Y es ahí donde hará falta
plantearos la cuestión de ¿cuál es la cosa más importante, para vosotros? ¿La
Luz o lo demás, todo lo demás? Y será necesario responder a esta ecuación, a
esta demanda. Si queréis apropiaros de la Luz, simplemente para salpimentar
vuestra vida de Luz, para enmascarar el miedo, la Luz se os escapará. Si asentís
a la Luz, el Amor os llenará y llenará el mundo. Es el desafío que tenéis que
vivir todos, en grados diversos y en momentos diversos. Y constataréis también
que, cualquiera que sea el desorden del mundo, aunque existan en vosotros
pequeños desórdenes, el Amor, la Luz será mucho más poderoso que todos los
desarreglos de este mundo. Pero aun es necesario hacer la elección de la Luz, no
como una elección de destino, no como un destino final, sino más bien en lo que
es aceptado vivir o rechazado vivir. Como siempre, vosotros sois el único
maestro a bordo en este vehículo, en vuestra conciencia. No escuchéis a nadie,
no escuchéis más que lo que os dice la Luz. Si os pide pararos al borde de la
carretera, hacedlo. Si os pide meteros en la cama el tiempo necesario, hacedlo.
No hay obligación que se mantenga ante la Verdad de la Luz o si no, significa
simplemente que no querréis más que ser salpimentado de Luz y continuar vuestra
vida ordinaria, sin cambiar nada, aunque reclaméis y supliquéis la Luz. Estáis
cara a vuestras propias responsabilidades y ahí está el Choque de la Humanidad.
Asentid a la Luz ¿dónde estáis en el miedo y la negación? No habrá otra
alternativa y cada uno es libre de vivir eso para lo que ha venido a esta
Tierra, en este tiempo. Pero más y más, como decían MARÍA y MA (ndr: MA ANANDA
MOYI), no podréis vivir el miedo y el Amor. Será lo uno o lo otro.
No os inquietéis (como se ha dicho y repito ahora) para aquellos que
por el momento, no parecen vivir ni ser afectados por este proceso. Contentaos
viviendo lo que la Luz os pide a vosotros, estando atento a vuestro objetivo. La
verdadera Vida os va a aparecer como algo que no es de este mundo, pero mientras
que no lo viváis, no sirve de nada decíroslo. Simplemente, como diría BIDI,
refutar ese Efímero da ya es un apoyo a la apertura de la Puerta hacia la
Eternidad. No dudéis vivir cada vez más intensamente la Luz, sin restricción y
sin freno, y sobre todo, sin miedo. No tenéis otra solución que resistir o
Abandonaros totalmente, mantener una identidad o aceptar perder esta identidad,
no para el vacío sino para el Lleno y la Plenitud. Esto puede efectivamente
plantear un pequeño problema para la personalidad, puesto que a ese nivel hay
una elección crucial: la Resurrección o la no Resurrección, la aceptación o el
rechazo.
Por supuesto, hasta el presente era fácil decir que buscabais la luz,
que estabais en el camino espiritual, que purificabais lo que llamáis Karma, que
evolucionabais. Pero la Luz no es una evolución. El Amor no es una evolución.
Como se dijo ayer, es una transubstanciación: es el Pasaje de la oruga a
mariposa. La oruga es efímera, la oruga como se ha dicho, no conoce a la
mariposa. En este nivel hay que hacer un acto de Abandono. Entonces nosotros
somos también conscientes de que según vuestra historia personal, los miedos
están quizá más o menos ahí, son más o menos intensos. Acordaros en los momentos
en que el miedo se manifieste o si no, en los momentos en que dudéis, que
vuestra Esencia es Luz y que la Luz está mucho más allá de ese género de
cuestionamientos, de preguntas. Llamadnos, os ayudaremos, en esos momentos. Si
aparecen síntomas en el cuerpo, si aparecen visiones, si hay manifestaciones en
este cuerpo o en vuestros cuerpos sutiles, en los momentos de Éxtasis o de
Estasis, no os preocupéis, id más allá. La Luz sabe lo que tiene que hacer.
Vuestras resistencias reforzarán las manifestaciones, los dolores u otras cosas.
El Abandono del Sí y el Abandono a la Luz os harán constatar muy rápido, por
vosotros mismos, si esto se vive, que los únicos elementos que pueden impediros
vivirlo eran los miedos, no hay otro fundamento. Viviendo el Éxtasis, viviendo
Shantinilaya y viviendo el Absoluto, podréis efectivamente, constatar por
vosotros mismos, que de hecho esto siempre ha estado ahí y que solo los
mecanismos del pensamiento, los mecanismos de adhesión a creencias, diversas y
variadas, os habían impedido vivir y ver más allá de cualquier visión. Pararé
aquí mis palabras. Permitidme permanecer con vosotros en silencio, unos
instantes, sin desear nada, sin pedir nada, sin evocar siquiera Comunión u otra
cosa: simplemente Presente a vosotros mismos, Presente a cada uno de nosotros,
aquí.
…Compartiendo el Don de la gracia…
Y acordaros también, que todos los placeres de este mundo, sean los
que sean, solo pueden ser efímeros. El placer de la Luz es Eterno y Eternidad:
es mucho más vasto que el placer de la satisfacción de lo que sea. Esto es una
certeza, desde el instante en que lo aceptáis, porque lo viviréis. Estáis aquí
por eso. Yo terminaré con estas frases: todo lo que nace de la carne es
perecedero y efímero. Solo el Espíritu es Eterno y vosotros Sois ante todo,
Espíritu. Prisioneros en una carne que es necesario por tanto, llevarla también
a su Libertad.
Yo soy GEMMA GALGANI, os Amo. Vosotros sois yo, como yo soy vosotros:
la Unidad del Amor, en una multiplicidad de apariencias. La Unidad de la Luz. La
Alegría de la Luz. Os digo hasta la próxima vez. Que la Luz sea vuestra Morada.
Que la Paz sea en vosotros a cada aliento. Hasta pronto.