YO soy Jophiel, Arcángel de la Luz dorada y del Conocimiento. Hijos de la Ley del Uno, me ha sido pedido venir entre ustedes, hoy y en este instante. Reciban toda la Luz de Amor y del Espíritu. Juntos, vamos a desarrollar un elemento importante permitiendo, más allá mismo de las palabras, de captar la diferencia mayor existente entre conocimiento esotérico y Conocimiento del Corazón.
Evidentemente había yo ya expresado, hace ahora tres años, un cierto número de elementos concernientes a eso. Hoy, intervendré, porque de ahora en adelante, dentro de los tiempos que viven, van a encontrarse confrontados, no solo en el interior de ustedes sino de manera visible exteriormente, un cierto número de ideas y un cierto número de enfoques de la Verdad y de la Luz. No existirá, en ustedes, algún medio, por las capacidades del intelecto y de la razón, de saber dónde está la Verdad. La única forma será de vivirlo, bien mas allá de vuestras Creencias, bien mas allá de vuestras adhesiones pero, más bien en vuestra capacidad Vibratoria, bien real, de entrar en atracción y en resonancia por relación a los hechos y por relación a las manifestaciones formando parte de un conjunto preciso, del cual el bien amado Sri Aurobindo los ha mantenido informado desde hace numerosos meses y recientemente.
Vuelvo de nuevo, algunos momentos, sobre este concepto de Conocimiento. Desde tiempo inmemorial, el ser humano ha aplicado la herramienta mental para progresar en su Conocimiento. Conocimiento, también de las normas de funcionamiento de este universo, de sus leyes vinculadas a la observación, a la experimentación, de las cuales se derivan normas de funcionamiento pudiendo ser aplicadas en esta Dimensión, eso yendo de la tecnología, pasando por la informática, las técnicas, matemáticas, todo lo que puede, en resumen, conceptuarse, aprender, y ser llevado a la práctica.
El gran error, y la gran seducción, consistieron en hacerles creer que en lo que se refería a los mundos del Espíritu, eso estaba incluido en el mismo proceso de aprendizaje, del mismo proceso de concepciones, de Creencias, y que iba a encontrar pues, una eficacia en la vida espiritual. Desgraciadamente, el conjunto de estos conocimientos exteriores, aplicados a la espiritualidad, que llamaría conocimiento esotérico, sólo tuvo un único objetivo y uno sólo: alejar a ustedes, permanentemente, del Corazón o, si prefieren, del Sí. Así pues, mientras el ser humano esté preso de un sistema de Creencias, preso de una adhesión a un dogma o a una historia (fuera lo más prestigioso, habiendo sido vivido por algunos seres en la superficie de este planeta), siguen ustedes siendo incansablemente prisioneros y encerrados en sus propios dogmas y sus propias Creencias.
Tanto como el Conocimiento exotérico, aplicándose al conocimiento de este mundo, les es útil para llevar a cabo una determinada forma de vida en este mundo, aplicar los preceptos del Espíritu, bajo esta forma de Conocimiento, no puede conducir sino a un aislamiento y un encerramiento, lo que es el caso exactamente de lo que ha vivido la humanidad desde tiempo inmemorial. El conjunto de los conocimientos dichos esotéricos, sin excepción, nunca podrán traerles al Sí.
Por supuesto, muchas de estas enseñanzas, las más sofisticadas, intentaron hacerles creer que a través de esta vía (llamada árida o conocimiento esotérico), llegarán a la apertura del Corazón. Eso nunca se ha producido, y no se producirá nunca. Toda ilusión, en particular desde el principio Siglo XX siglo en que se aplicaron una serie de planes, en la humanidad, destinados a establecer una hegemonía mundial y una servidumbre total, se han basado en estos conocimientos esotéricos que describían leyes, bien reales, del Espíritu pero alejándoles del Espíritu y haciéndoles creer que la personalidad, apoderándose de este conocimiento a través de lecturas y experimentaciones, bien distante del Sí, iba a permitirles penetrar los arcanos del Espíritu. Eso no hizo más que, al nivel de la humanidad, reforzar lo que llaman la personalidad y el ego, en su deseo, sin embargo auténtico, de acceder en el origen del Misterio.
El conjunto de los conocimientos exteriores esotéricos, vinculados a las Creencias o a la adhesión de dogmas, ritos, ejercicios, sin excepción, sólo estuvo allí para alejarles del Corazón. El Corazón no es la estupidez. El Corazón no es la idiotez. El Corazón es, precisamente, la Inteligencia, más allá de la inteligencia limitada. Desde el principio del Siglo XX, una serie de Maestros reales se personificaron sobre la Tierra para aportar su Luz. Aunque algunos de ellos pasaron por enseñanzas dichas exteriores, la mejor enseñanza fue su propia Presencia simplemente y su propia Realización del Sí, en la Luz Una. El principio de encerramiento del conocimiento esotérico resulta de la más grande de las leyes, aplicada en este mundo falsificado, llamada acción/reacción o Dualidad y karma. Una serie de conceptos, introducidos por las religiones, o por sistemas elaborados de Creencias, hicieron creer a la humanidad que iba a poder encontrar la felicidad y sobre todo, la comprensión de este mundo, por los conocimientos exteriores, más estrictos, vinculados a la ciencia y a la observación. Este plan, ya que ese fue uno, no contempló, recuerden, más que alejares, siempre y aún más, de su Corazón.
Entonces, por supuesto, estos conocimientos dichos de sobra esotéricos, en gran medida, utilizaron la palabra Corazón y la palabra Amor pero encubriéndoles siempre la Verdad Vibratoria, y exclusivamente Vibratoria, de lo que es el Corazón o la Unidad o Realización del Sí. En la actualidad, el conjunto de estas concepciones erróneas, sea de Creencias o aplicaciones de dogmas falsificados, llega a final de curso. Obviamente, una multitud de seres humanos, creyendo hacer bien, aplicó este conocimiento y estas prácticas trabajando, esencialmente, como ya se sabe, sobre la ilusión Luciferina, llamado el tercer ojo. La derivación de la Conciencia de la humanidad hacia este tercer ojo reforzó, por supuesto, la Dualidad, reforzó, por supuesto, el aislamiento y la incapacidad para estos seres humanos de buscar, de tocar su propia Esencia. Y no obstante, que eso sea, estos grandes Seres habiendo recorrido, sus pasos, esta vida, en un cuerpo humano, que sea llamado Jesucristo, que sea llamado Buda, que sea llamado Mani, y bien otros, todos ellos fueron, realmente, los precursores y enunciaron Verdades que el conocimiento exterior inmediatamente modificó, para que el sentido original del mensaje sea perdido.
A mediados del siglo XX, las circunstancias Vibratorias de esta Tierra han comenzado a modificarse, de manera imperceptible, permitiendo a algunos seres experimentar, por adelantado, el descenso y la apertura a la verdadera Luz que es Vibración del Corazón, aún llamada, por el que habló primero, Supramental, para diferenciar bien la calidad, incluso, energética, de lo que pertenece a este mundo y de lo que no pertenece a este mundo. La Energía, la vitalidad, el Prana, las fuerzas puestas en juego en este mundo, son fuerzas que funcionan por fricción, por oposición y por antagonismo. El equilibrio puede calificarse de inestable, en permanente desequilibrio, resultante de la acción de dos fuerzas opuestas traduciéndose, en el absoluto, por lo que se llamó el bien y el mal. Obviamente, el mal haciendo mal, era lógico de aplicar y de aportar, en la ignorancia total de lo que era la Energía Supramental, una fuerza diametralmente opuesta, llamada el bien. Aplicar una fuerza y aplicar su opuesto nunca permite solucionar el antagonismo, no hace más que mantener un precario equilibrio. Eso, el conjunto de la humanidad, y, los que están aquí o que leerán, lo saben muy bien, puesto que definen incluso, dentro de ustedes como en la comunidad humana, por ejemplo, la paz como el estado entre dos guerras o la guerra como un estado entre dos paces. De la misma forma, que sus humores, sus emociones y sus actitudes mentales, e incluso sus comportamientos, cualquiera que sea la vida que llevan, habían, hasta ahora, permitido esta alternancia de placeres, descontentos, sucesión de acontecimientos haciéndoles equilibrar, permanentemente, de una Energía a otra. En efecto, en la vida Dualitaria y cualesquiera que sean los conocimientos o las Creencias, no hay nunca rebasamiento de esta Dualidad, de esta fricción, de alguna manera.
Entonces, la humanidad se ha alejado, poco a poco, incluso de la Creencia espiritual, hacia cualquier otra cosa, resultando, como eso perfectamente se les había descrito, en el Upanishad (escrituras hindúes) como la Kali Yuga o edad oscura.
Para aquellos de entre ustedes que han mantenido una búsqueda, al sentido espiritual, desde el Siglo XX, se ha introducido, en la sociedad occidental, (ya se introducía desde hace mucho tiempo en las sociedades orientales y de Extremo Oriente), la ley de acción/reacción, a nivel espiritual. Es decir, que se transpuso que lo que existía a nivel exotérico funcionaba exactamente de la misma forma, que a nivel esotérico. Ley de acción/reacción, transcrita, a nivel espiritual, por la ley de karma. Y se les vendió, hasta cierto punto, que la ley de karma regulaba los mundos espirituales y que era necesario purificar, por la práctica del bien, su karma y de hacerles entrever que si sucedía algo dañino, si no tenían la explicación en su vivir presente, esto podía ser remitido a una acción muy antigua, y en consecuencia permitía soportar, sin entenderlo (lo que es a pesar de todo la paradoja para algo de este nivel) su desdicha, un accidente o una enfermedad. El conjunto de la humanidad está por consiguiente, o sobre la vertiente exotérica, o sobre la vertiente esotérica, puesta en movimiento hacia esta ley de acción/reacción y por lo tanto adherida en masa, que eso sea a nivel empresarial, a nivel psicológico, como a nivel espiritual, a esta Dualidad. En ese momento, el Corazón se ha convertido en un concepto, un ideal, una conducta moral, o también la adhesión a un gran personaje titulado Salvador o profeta (según las religiones) que era necesario seguir, al cual era necesario adherirse, en la revelación o en la afirmación con el fin de esperar, un día, escaparse a las condiciones limitantes de este mundo. Durante el Siglo XX, poco a poco, se instaló, y solamente durante el Siglo XX, una capacidad, nueva para el ser humano, de distinguir entre lo que era bien y mal, tanto a nivel esotérico como exotérico. Pero este bien y este mal sólo se definían por una Creencia previa y por la adhesión a dogmas previos transportados por las religiones, por la ciencia o por la adhesión a nuevas espiritualidades. Así pues, poco a poco y progresivamente, durante el Siglo XX, el conjunto de la humanidad, a nivel colectivo, se encontró, literalmente, atrapado y encerrado en una visión Dualitaria donde, sin cesar, se suministraba el combate del bien y el mal, en una especie de escatología permanente que, cuando llegara a su término, permitiría encontrar el paraíso o, en cualquier caso, una condición donde el bien se establecería como valor absoluto. Obviamente, el bien del uno, no es el bien del otro. Obviamente, el bien de una religión, no es el bien de otra religión. La única palabra que es común se llama el Corazón. Pero ese Corazón no es una Conciencia sino una idea. Y esta idea, derivada de Creencias y de la manifestación de la Dualidad, no pudo, evidentemente, romper jamás el círculo vicioso de la acción y reacción.
Para aquellos de entre ustedes que han mantenido una búsqueda, al sentido espiritual, desde el Siglo XX, se ha introducido, en la sociedad occidental, (ya se introducía desde hace mucho tiempo en las sociedades orientales y de Extremo Oriente), la ley de acción/reacción, a nivel espiritual. Es decir, que se transpuso que lo que existía a nivel exotérico funcionaba exactamente de la misma forma, que a nivel esotérico. Ley de acción/reacción, transcrita, a nivel espiritual, por la ley de karma. Y se les vendió, hasta cierto punto, que la ley de karma regulaba los mundos espirituales y que era necesario purificar, por la práctica del bien, su karma y de hacerles entrever que si sucedía algo dañino, si no tenían la explicación en su vivir presente, esto podía ser remitido a una acción muy antigua, y en consecuencia permitía soportar, sin entenderlo (lo que es a pesar de todo la paradoja para algo de este nivel) su desdicha, un accidente o una enfermedad. El conjunto de la humanidad está por consiguiente, o sobre la vertiente exotérica, o sobre la vertiente esotérica, puesta en movimiento hacia esta ley de acción/reacción y por lo tanto adherida en masa, que eso sea a nivel empresarial, a nivel psicológico, como a nivel espiritual, a esta Dualidad. En ese momento, el Corazón se ha convertido en un concepto, un ideal, una conducta moral, o también la adhesión a un gran personaje titulado Salvador o profeta (según las religiones) que era necesario seguir, al cual era necesario adherirse, en la revelación o en la afirmación con el fin de esperar, un día, escaparse a las condiciones limitantes de este mundo. Durante el Siglo XX, poco a poco, se instaló, y solamente durante el Siglo XX, una capacidad, nueva para el ser humano, de distinguir entre lo que era bien y mal, tanto a nivel esotérico como exotérico. Pero este bien y este mal sólo se definían por una Creencia previa y por la adhesión a dogmas previos transportados por las religiones, por la ciencia o por la adhesión a nuevas espiritualidades. Así pues, poco a poco y progresivamente, durante el Siglo XX, el conjunto de la humanidad, a nivel colectivo, se encontró, literalmente, atrapado y encerrado en una visión Dualitaria donde, sin cesar, se suministraba el combate del bien y el mal, en una especie de escatología permanente que, cuando llegara a su término, permitiría encontrar el paraíso o, en cualquier caso, una condición donde el bien se establecería como valor absoluto. Obviamente, el bien del uno, no es el bien del otro. Obviamente, el bien de una religión, no es el bien de otra religión. La única palabra que es común se llama el Corazón. Pero ese Corazón no es una Conciencia sino una idea. Y esta idea, derivada de Creencias y de la manifestación de la Dualidad, no pudo, evidentemente, romper jamás el círculo vicioso de la acción y reacción.
La humanidad, de manera consciente o inconsciente, se ha encontrado proyectado dentro de una nueva era llamada tecnológica, dentro de una era donde aparecieron una serie de creaciones muy útiles para la vida exterior, salidas de este conocimiento exotérico, sobre el cual se ejercitó, muy naturalmente, un conocimiento esotérico, mecanicista, Dualitario y alejándose siempre más de la Esencia. Mucho antes de este Siglo XX, una serie de seres, durante muchos siglos, han conseguido, como por milagro, alcanzar estados completamente fuera de lo ordinario y fuera de este mundo y traer un estado Interior bien diferente de lo que podía se enseñado o transportado por las Creencias y los dogmas. Ciertos de entre ellos fueron conocidos. En occidente, por ejemplo, existe Sören Kierkegaard. Ciertos seres, excepcionales por su capacidad de extraerse de la ilusión, han tocado eso que ustedes llaman, ahora, las esferas de la Unidad y la Vibración del Corazón. Pero, las circunstancias Vibratorias y las manifestaciones de ciertas influencias Arcangélicas, cíclicas, manifestándose en resonancia con los movimientos planetarios y los grandes ciclos cósmicos, nunca han permitido a estos seres percibir claramente, y describir claramente, los procesos Vibratorios, más allá del Fuego eléctrico, que les habían permitido manifestar esta nueva consciencia.
Desde el inicio del Siglo XX, la era dicha industrial, el desarrollo de eso que ha sido llamado electricidad (ella también derivada de un fuego por fricción) ha permitido el desarrollo de una forma de comodidad Dualitaria. La expresión de un cierto número de dogmas y de Creencias, puestas en práctica por la humanidad, ha permitido, como siempre, la aparición, ante sus propios ojos, de la exteriorización si lo prefieren, de estos principios de Dualidad. Es en este momento que la exteriorización de fuerzas espirituales opuestas a la Luz unitaria se hizo día y transmitió por distintas vías, una enseñanza en que la finalidad, por supuesto, no era aquella que decía, sino de encerrarlos, todavía más, en el seno de nuevas Creencias, de nuevos dogmas ya que, efectivamente, la manifestación exotérica y la exteriorización de las tecnologías ha alejado al ser humano de eso que fue llamado la devoción y por eso la Creencia absoluta en un Salvador o un profeta. Fue necesario hasta sustituir, en cualquier forma, estas historias antiguas y expiradas, por algo seductor y yendo en el sentido de la Dualidad. Es en ese momento, que se formaron muchas de las enseñanzas destinadas a perpetuar una forma de conocimiento, alejándoles todavía más, del Corazón pero haciendo, obviamente, hablar sin parar del Corazón, sin vivir en los aspectos esenciales y fundamentales.
Ciertos seres, en los años 1940 y 50, período perturbado de la historia de la humanidad, momento donde apareció el fuego nuclear, la apoteosis de las fuerzas del fuego por fricción, permitieron pues a ciertas gentes, debido a esta acción de fuego nuclear, transportar, en nivel más alto jamás realizado por la humanidad, eso que fue llamado la ilusión Luciferina. Preciso, para aquellos que no lo saben, que la ilusión Luciferina no tiene nada que ver con el principio de Lucifer, portador de la Luz. Se trata de una desviación y de una manifestación de la Dualidad, inducida por los mismos dogmas y las propias Creencias, definidas como conocimiento exotérico, científico donde el marcador más grande es la electricidad, conduciendo progresivamente a la humanidad a crear, literalmente, un plano invisible al nivel del Éter de la Tierra, encerrando aún más, evolucionando fuera de toda influencia Unitaria, de toda influencia cósmica, si lo prefieren, habiendo llegado a la concretización, cada vez más fuerte, de lo que llamaremos, si lo quieren bien, una dimensión de malla, reemplazando las fuerzas electromagnéticas naturales ya perturbadas, por una malla eléctrica, que todos ustedes conocen, hoy, en sus distintas tecnologías. El único objetivo de todo eso solo fue traer a la manifestación y a la exteriorización de principios opuestos a la Luz Vibral, a la Luz Unitaria, encerrándoles todavía más en la ilusión. Mismo si, hoy, y desde hace un número muy reducido de decenas de años, es posible, por lo mismo de la afluencia de la Luz Vibral sobre la Tierra, de ponderar eso que digo, conviene aceptar, no el principio, sino comprobarlo por ustedes mismos.
Ese Fuego encerrante, llamado, en el hombre, Fuego del ego, Fuego eléctrico, ha permitido la creación, literalmente, de entidades autoconscientes pero no teniendo ningún vínculo, tal como ustedes, almas humanas, con una Fuente, puesto que la propia Fuente de estas entidades no es más que las dogmas y Creencias humanas, exteriorizadas, creadas y manifestadas. Esta corriente particular es una corriente que se refuerza permanentemente.
Representa una fuerza de oposición y resistencia a la Luz Vibral pero posee ella misma sus propias leyes, también resultantes de la acción-reacción y sostenidas por un cierto plan que pertenece, en totalidad, a la matriz y no teniendo estrictamente nada que ver con la Luz Vibral y los Mundos Libres. Poco a poco, se es entonces substituido a eso que llamaría el libre albedrío del hombre, una esclavitud total a estas fuerzas creadas por la humanidad ella misma. Esas fuerzas han sido llamadas fuerzas (Arhimanianas) de la obscuridad o fosilización, basadas por el principio de la ilusión Luciferina de Dualidad y también por una serie de fuerzas que históricamente, en un pasado muy lejano, siempre han contemplado como su propiedad a las Consciencias presentes en el seno de un cuerpo, propiedad que ustedes encuentran nombrada, de manera expresa, en las Escrituras y en los calificativos aplicados a este ser cuyo nombre no puede pronunciarse o entonces, si es pronunciado, les hablará a ustedes en términos de Dualidad, de pecado, de castigo, pero jamás de Amor, incluso reivindicando el Amor. Y aunque un ser vino, debido a su autonomía Unitaria, a expresar, en el seno mismo de una religión, una Verdad, esta entonces inmediatamente, ha sido transformada, alterada e invertida para invertir en verdad el mensaje inicial.
Lo que tienen bajo sus ojos, hoy, en este año, no es más la confrontación Interior con ustedes mismos, tal como yo la había definido durante el año 2008, pero es la confrontación de la humanidad, en su totalidad, entre, por una parte, este Fuego por fricción, Fuego eléctrico y luego nuclear, conducido a su extremo y destinado a hacer brotar, literalmente, una nueva Consciencia autónoma, totalmente privada, esta vez, de una conexión a la Fuente, llamado Fuego nuclear, pasando, por el momento, fuera de ustedes, pero debiendo también, en los planes maquiavélicos, pasar al interior de ustedes. Esta confrontación va a poner hasta cierto punto, cara a cara, por una parte, las fuerzas de la Dualidad (ya opuestas ellas mismas las unas a las otras, tal como lo observan en su mundo de depredación y competición, que eso sea a nivel social económico o entre los países) y por otra parte entre las creencias y dogmas antiguos establecidos, incluso expirados, llamados las religiones y algunas nuevas enseñanzas dichas nuevas, aparecidas en el siglo XX, cuya finalidad es hacerles adherir a nuevos dogmas encerrándoles aún mas, esclavizándoles aún más a eso que es llamado una jerarquía exterior, debiendo controlar y regir, en cualquier forma la evolución del humano, lo cual no será jamás una evolución sino que era, en su objetivo inicial y en su objetivo aún hoy, una involución. Así pues, la mejor manera de lograr sus fines, para aquellos que, hasta cierto punto, obtuvieron las cuerdas de este conocimiento, era maquillar, literalmente, de espolvorear este conocimiento esotérico con elementos y palabras que pertenecían a la Luz Vibral pero jamás permitían, revelar la Luz Vibral.
Esta confrontación va pues a concernir al conjunto de las Creencias nuevas y antiguas, en distintos pueblos, en distintas corrientes religiosas, filosóficas o espirituales, entre ellas. Estas distintas corrientes, que llamaría Luciferinas o Arhimanianas, (de la oscuridad o fosilización) las dos a la vez, generalmente ahora, van a volver a entrar en oposición frontal a la Unidad. Allí es donde se encuentra el reto, hoy, de la humanidad y, en particular, de la parte que comienza a descubrir y a vivir la Unidad de su liberación y aquellos de entre los humanos estando aún encerrados y subordinados a las Creencias o a las enseñanzas más recientes, habiéndoles encerrado aún más en la ilusión Luciferina.
Por otra parte como lo decía Buda, la ilusión Luciferina consiste en el encerramiento en los poderes y, como ya lo saben, no puede haber el Corazón y el Amor Vibral en tanto que exista el menor poder. Esta confrontación tiene lugar, por supuesto, desde ahora. Ella resulta del Fuego del Espíritu, Fuego del Espíritu llevado por las partículas Adamantinas, el Espiritu Santo, las Radiaciones del Ultra Violeta que vienen, literalmente y concretamente, a oponerse al Fuego por Fricción o Fuego eléctrico. Cuando hablo de confrontarse y oponerse, esto no es un combate. Por supuesto, las fuerzas de confrontación Dualitaria, ellas, buscarán un combate porque esto es su Esencia misma, encontrar un adversario para enfrentarse.
Mientras que la Unidad debe establecerse, como es el caso actualmente, y como será el caso cada vez más cada día, como eso les fue anunciado por Sri Aurobindo y por otros Arcángeles estos últimos días. Para la humanidad despertada, la única manera de resistir, a este Fuego nuclear, a este Fuego por fricción espiritual, es establecerse, cada vez más, en lo que conocen, y sobre lo cual no volveré de nuevo, que son las Coronas Radiantes, los diferentes puntos de Vibración percibidos y vividos, más allá de toda adhesión a toda Creencia o a todo discurso.
Así pues, cada uno y cada una, sobre esta Tierra, va a deber, no tomar ventaja de las elecciones que han sido realizadas, hace ya mucho tiempo, sino llevar a término su propia transformación Interior que les permitirá, de manera definitiva, ya sea de permanecer en un mundo llamado carbonoso, sea de liberarse de un mundo carbonoso para ir hacia los mundos sílices y más allá. La diferencia entre los dos es, lo han comprendido, exclusivamente Vibratoria. En un caso, se desarrollará el Fuego eléctrico, Fuego nuclear, con todos los daños que eso causará en la estructura, del ser humano, conectada a la Fuente a pesar de todo. Y en el otro caso, aquellos que estarán en los procesos Vibratorios reales, vividos, manifestados y percibidos, que eso sea, como ustedes lo han comprendido, al nivel del punto ER de su cabeza, como en el punto ER del Corazón o aún, para ciertos de entre ustedes, por el conjunto de los puntos ER y el conjunto de los tres Hogares (tres fuegos o las tres coronas). Según su pasar a ser Vibratorio, presente, incluso en encarnación, se dibujará, y ya se dibuja, su futuro carbonoso, de sílice u otro. Por supuesto, los partidarios de la dualidad, los defensores de los dogmas antiguos o los dogmas nuevos, de las creencias, no podrán absolutamente vivir y percibir lo que ustedes notan en un nivel o en otro. Esto acarreará esta confrontación colectiva de la humanidad en la que habéis entrado.
La Luz Vibral, como ustedes lo saben, el Fuego del Espiritu, en adelante, puesto que las tres radiaciones que les han sido descritas por el Arcángel Miguel, radiación del Ultra Violeta, partículas Adamantinas, radiación de la Fuente, Espíritu Santo, en adelante se fusionan en totalidad. Esta fusión desemboca en la aparición, en un gran número de días más consistentes, de partículas Adamantinas, de radiaciones cósmicas, de radiaciones Terrestres, de radiaciones presentes incluso en vuestra atmósfera que, para sus científicos, transportan radiaciones extremadamente peligrosas, y ellas lo son para la Dualidad y para un cuerpo encerrado, pero ellas no son absolutamente peligrosas, bien al contrario, para una Consciencia despertando el aspecto Vibratorio en ella, cualquiera que sea la fase. Todo esto va a ocurrir, en los momentos que viven, para exteriorizar y para manifestar la realidad de esta confrontación en el conjunto de la sociedad de la humanidad. Como ciertamente ya lo saben, de su capacidad para penetrar más adelante en la Vibración, en su Presencia, en su capacidad de penetrar, cada vez más, en este Conocimiento del Corazón (que es el único Conocimiento, ya que les conecta y no los aísla, les conecta a sus aspectos multidimensionales, les conecta a la Fuente enteramente, a la Unidad y sobre todo, a la Paz y a la Alegría), de la calidad de la instalación de la Paz y la Alegría en ustedes, va a derivar, para ustedes, colectiva e individualmente, su capacidad para sobrepasar y trascender esta confrontación que no les concierne pero que concierne realmente, a los dos principios. Es en este sentido, que en numerosas ocasiones el Arcángel Miguel y los otros Arcángeles, les han llamado: “Portadores de Luz”, “Estandartes de Luz”, “Sembradores de Luz”, recordándoles que, dentro de su Consciencia, cuando tocan y manifiestan su Unidad (llamada, en otra forma, la Realización del Si o Samadhi, el estado de Consciencia de Paz, llamado en el hinduismo, Sat Chit Ananda), van a tener la capacidad Vibratoria y de Consciencia, reales, para no entrar en oposición, la oposición haciéndoles, por definición, penetrar otra vez las esferas de la ilusión Luciferina.
La personalidad, encendida y despierta, tiende, por supuesto, a funcionar según las reglas de este mundo, y tenderá a implicarles en la acción/reacción. Allí se verá la acción de la sabiduría del Corazón y el Conocimiento del Corazón, recordándoles, por la presencia o la interrupción de la vibración, si están sobre su camino Unitario o si se alejan de su camino, para volver a caer bajo la influencia del Fuego del Ego, Fuego de la personalidad, Fuego eléctrico de la Dualidad y nuclear. Durante este período que se abre de vuestro mes de abril, las radiaciones de la Tierra, la afluencia de la Luz sobre la Tierra va a continuarse. El resultado será, lo han comprendido, profundamente diferente, según lo que habrán integrado y habrán exteriorizado y, por eso, interiorizado. En un caso habrá sufrimiento, en un caso, habrá resistencia y, en el otro caso, habrá Paz, facilidad, Luz y Alegría.
Entonces, según, incluso, su humor, entonces según, mismo, la Vibración presente en ustedes, a cada instante, podrán situarse, extremadamente fácil, sobre un lado o sobre el otro lado de la confrontación global.
La Unidad no es una palabra, la Unidad no es un concepto, La Unidad es un estado de ser. En este estado de ser, hay Energías que nosotros llamamos Vibraciones, habiendo sido llamadas Energía Supramental o también Plan de la Consciencia (Energía de la Città). Las características de esta Vibración son aquellas que ustedes perciben al nivel de sus puntos de Vibración de la Cabeza, del Corazón, o de otra parte, y vienen, como lo saben, de su Êtreté, es decir de otra Dimensión no teniendo nada que ver con el funcionamiento de este mundo.
De su calidad, que yo llamaría de aceptación, y que el Arcángel Anael ha llamado de integración en resonancia con su integridad, podrán entonces vivir, fácil o difícilmente, pero vivir su resurrección. Este es el proceso que está exactamente en curso, ahora, regresando a la imagen y al nombre dado por el Gran Comendador, de “oruga” y de “mariposa”. La confrontación del Fuego nuclear, eléctrico y del Fuego del Espíritu va a permitir, paradójicamente, para muchos de entre ustedes, para aquellos de entre ustedes que se adhieren pero que no viven aún eso, despertarles a su Dimensión Unitaria. Y eso es durante este mes.
De la interacción de esta confrontación no resultante de la Luz Vibral sino de la puesta en luz, si lo prefieren, del Fuego eléctrico o Fuego Arhimaniano y Luciferino, y del otro lado, del Fuego del Espíritu y la Fuente, va a resultar, hasta cierto punto, eso que llamaría, como eso se ha dicho, una desintegración total de esta Dimensión, llamada nuevo nacimiento, Resurrección, y para la Tierra, parto. Esta es la confrontación, a nivel colectivo, entre el Fuego eléctrico nuclear y el Fuego de los Espíritus que se traducirá por una calidad Vibratoria audible. La llegada del sonido del Cielo y del sonido de la Tierra desencadenará un cierto número de procesos que se extienden, en adelante, bajo sus ojos, cada día. Pero eso que pasa afuera, también pasa en ustedes. Ciertos de entre ustedes, cualquiera que sea su apertura a la Luz Unitaria, aún no penetraron, enteramente, su Unidad, incluso sin hablar de ir en su cuerpo de Êtreté. Para la mayoría de los seres, el Fuego del ego puede ahora manifestarse. Recuerden que el Fuego del ego va a atraer esta Luz Vibral, manifestándose a favor del ego, es decir, de la apropiación y no de la donación. La personalidad hasta va a encontrar todos los subterfugios para derivar y desviar la Luz del Corazón. Es en este sentido que sus espacios de alineamiento, que sus espacios Vibratorios son un privilegio a fin de estar seguros y ciertos de permanecer o de volver a entrar en Unidad. El Conocimiento del Corazón es ese uno. Y nada más. Y es por eso que Cristo o Buda, en otras palabras, hablaban de la infancia, hablaban de la ilusión del mental y de las emociones y de la ilusión de este mundo.
Esto va a tomar, yo diría, todo su peso y toda esta ligereza, en función de lo que vivirán, durante el mes que se abre ante ustedes (se refiere al mes de Abril 2011). El conjunto de la Confederación Intergaláctica de los Mundos Libres, a causa de la acción de las fuerzas Arhimanianas y Luciferinas, en la conducta del fuego nuclear, ha conducido a la liberación total de la Ola Galáctica, de acuerdo con Gaia, para llevar a cabo su subida. Esto se ilustra, en ustedes, como al nivel de las perturbaciones, yo diría, más bien de entrega en orden, observadas por sus científicos y concernientes a los elementos, precisamente, vinculados a la electricidad, al magnetismo y a la Luz. Es a esto que ustedes están confrontados exteriormente e interiormente. En resumen, eso puede resumirse empleando las palabras del Gran Comendador: “¿Quieren ser mariposa?” Pero si quieren ser mariposa, no pueden seguir siendo oruga.
Una vez más. Y así como fue precisado por Sri Aurobindo, no conciban esto como una derrota, bien al contrario, sino una victoria. Ya que lo que querrá mantenerse, en ustedes, es la ilusión, a través de un discurso algunas veces, mitigando las reacciones para oponerse al mal, un discurso algunas veces impreso y lleno de Amor en las palabras, para mantener, cueste lo que cueste y valga lo que valga, la ilusión. Intenten, obviamente, colocarse más allá de este juego Dual, no para ser vencidos sino, más bien, para manifestar, con aún más firmeza y Abandono, su Presencia en el seno de la Luz Vibral. Aquí pues lo que se lleva a cabo, aquí pues lo que se desarrolla ahora. ¿Van ustedes a participar en el encerramiento, o van ustedes a participar en la liberación? De su estado de ser, de sus acciones, de sus comportamientos, de cada uno de ustedes, se derivará la realización de la liberación.
El Conocimiento del Corazón les invita a penetrar los espacios de Vibración de su propia Presencia, confiriendo la Alegría, la Paz y el Sat Chit Ananda. Observarán, si ya no es el caso, que existirán en ustedes, los momentos, cada vez más largos e intensos, donde vivirán el Fuego del Espíritu, pareciendo, por otra parte, desconectarse de esta ilusión. Les parecerá, en ciertos momentos, no estar más en la ilusión y esto es efectivamente, el caso.
Entre más la Luz Vibral penetre este mundo, más vivirán eso. Eso les evitará de ser confrontados al Fuego eléctrico, al Fuego nuclear de la Dualidad. Eso necesita también al nivel de su mental, más allá incluso de su pacificación y de su maestría por el Supramental y la Energía del Espíritu, de acoger y de vivir eso que han expuesto muchas de las Estrellas y las cuales vendrán después de mí, concerniente a la humildad, la simplicidad, el Aquí y el Ahora, la Ética, la Integridad, realizadas, más, por la Vibración Cristo, no teniendo estrictamente nada que ver, por supuesto, con un Salvador exterior viniendo a extraeros de vuestra propia condición. Aquí esto que me había sido pedido precisarles concerniente al Conocimiento, y todos eso que se opone al conocimiento esotérico. Si existen en ustedes, ahora, y con relación a eso, y exclusivamente con relación a eso, las preguntas, entonces responderé.
Pregunta: ¿Podría hablar sobre los cuatro Pilares, Integridad, Etica, Atención e Intención?
La Atención y la Intención se derivan, muy naturalmente, de vuestra capacidad para instalarse en eso que ha sido llamado el Aquí y el Ahora. Eso está ilustrado, al nivel de su cabeza, por los puntos de Vibración llamados IM e IS. Esto no es un concepto moral o social sino, allí también, un estado Vibratorio, es decir que puedan discurrir y elaborar, mentalmente, todo lo que, para ustedes está en relación con la Atención y la Intención. Es también más simple y eficaz, y lo constatarán ustedes mismos, al medir en Vibración las estructuras correspondientes al nivel de las Estrellas, esos puntos, para que su cerebro se ajuste a la Vibración y les haga penetrar instantáneamente, en el aquí y el ahora, más allá de todo esfuerzo y toda mentalización. En eso que concierne a la Ética y la Integridad, esas dos virtudes son también dos Vibraciones existentes al nivel de las Estrellas. Así pues, la percepción real de la presión de la Vibración, existente al nivel del punto OD y del punto AL, van a permitirles, llevar su consciencia arriba, allí también, vivir la Ética y la Integridad, más allá de los códigos morales y sociales. No voy, por lo tanto, a emplear palabras para definir lo que es la Ética Interior y la Integridad Interior sino ese lenguaje Vibratorio. Eso es llamado la Cruz de la Redención. Así pues, cuando la percepción de la Cruz de la Redención se instala al nivel de su cabeza, cuando ella es percibida, va a darles la capacidad, real, de ser Éticos, Íntegros y de estar en la Atención y la Intención. A partir de ese momento, no será necesario mantener, en el sentido humano, una Atención o una Intención o una vigilancia por relación a la Ética y la Integridad ya que es la Vibración por sí misma, por su acción sobre su cerebro, que inducirá los comportamientos, el aspecto moral y social, directamente resultantes del Interior, y en consecuencia del Corazón. La realización de la Cruz de la Redención y la instalación del circuito ER-ER han permitido pues la concienciación y la manifestación de su estado. Les será entonces muy fácil saber si sus actos, sus decisiones, sus pensamientos, estarán bajo la influencia de los cuatro pilares, o no, por la percepción Vibratoria ella misma.
En resumen, y reanudando esto que había dicho anteriormente, el ser humano, hasta el presente, había funcionado con su mental y sus emociones, con sus Energías Pránicas, con el Fuego eléctrico. Hoy, aprenden, en estos tiempos reducidos, a funcionar por la Vibración y por la inteligencia de la Luz. Pero para eso, una vez más, la humildad, la simplicidad y la supresión de la personalidad, debe ser total.
No tenemos más preguntas, les agradecemos.
Entonces bien amados, Hijos del Uno, les transmito el Amor de la Luz Dorada y ciertamente, hasta un día, puede ser.
No tenemos más preguntas, les agradecemos.
Entonces bien amados, Hijos del Uno, les transmito el Amor de la Luz Dorada y ciertamente, hasta un día, puede ser.
Canalizado por Jean Luc Ayoun
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Transcripción. Veronique Loriot